
El juez federal de La Plata con competencia electoral en la provincia de Buenos Aires, Alejo Ramos Padilla, rechazó por “imposible” el pedido del gobernador Axel Kicillof de modificar los lugares de votación previstos para las elecciones legislativas bonaerenses del próximo 7 de septiembre. A su vez, recomendó “no hacer reformas electorales en los años en que se vota”, en respuesta a las críticas por cambios en la asignación de escuelas y centros de votación.
La solicitud de Kicillof surgió tras las quejas de votantes que expresaron en redes sociales y medios que deberán votar en establecimientos diferentes a los habituales, algunos a varias cuadras de sus domicilios. Sin embargo, Ramos Padilla explicó que la reasignación de locales responde a un relevamiento realizado sobre más de 19.000 establecimientos en toda la provincia y consideró que no hay margen temporal para rediseñar el operativo.
“Debido a la poca anticipación con que se formalizó el desdoblamiento electoral y la cercanía con las elecciones nacionales, no es posible cambiar el plan de locales de votación”, remarcó.
Además, sostuvo que “no se cuenta con tiempo suficiente para un nuevo diseño” y que las fechas superpuestas de los comicios nacionales y provinciales dificultan una reorganización de último momento.
El planteo del Ejecutivo bonaerense había sido respaldado por la vicegobernadora Verónica Magario, quien calificó los cambios como “nefastos”. En respuesta, el magistrado advirtió sobre “los efectos adversos de introducir modificaciones a las normas que rigen los procesos electorales en los años que se celebran elecciones”.
Ramos Padilla reconoció que “muchos ciudadanos votarán en escuelas diferentes a las de 2023”, aunque aclaró que, en gran parte de los casos, los nuevos centros están incluso más cerca de los domicilios de los electores.
Por último, descartó que el nuevo esquema pueda incidir de forma determinante en la participación electoral. “El ausentismo tiene que ver con otras circunstancias, como la apatía, la crisis de representación, el cansancio electoral y la desinformación”, concluyó.