
En una jugada política que promete reconfigurar el escenario electoral porteño, La Libertad Avanza (LLA) y el PRO oficializaron este mediodía un acuerdo para competir en alianza en las elecciones legislativas nacionales del 26 de octubre en la Ciudad de Buenos Aires.
El comunicado conjunto, sin estridencias ni nombres propios, dejó en evidencia tanto la velocidad del pacto como las tensiones internas que aún lo atraviesan.
La gran ausente fue la foto. Ni los apoderados partidarios ni los líderes máximos Karina Milei y Mauricio Macri posaron para celebrar el entendimiento.
Esa imagen, que hasta el martes por la noche se creía inminente, fue descartada a último momento por la reticencia del macrismo a compartir protagonismo en una escena controlada por los libertarios.
“El objetivo es acompañar la agenda de reformas que lidera Javier Milei”, señala el comunicado difundido en simultáneo por ambos partidos. El PRO se comprometió a garantizar gobernabilidad en el Congreso, mientras que LLA, aunque sin decirlo abiertamente, se da por entendido que hará lo propio en la Legislatura porteña, donde el gobierno de Jorge Macri necesita apoyo.
A pesar de un año de fricciones, críticas públicas y silencios estratégicos, Karina Milei y Mauricio Macri optaron por una tregua silenciosa, impulsada más por la conveniencia política que por una reconciliación genuina.
El acuerdo se gestó y cerró en apenas 48 horas, pero las condiciones impuestas por el entorno libertario dejaron marcas en el PRO, no habrá sello, ni colores amarillos, ni logos tradicionales en la boleta conjunta.
Además, los candidatos del PRO ocuparán lugares secundarios: el quinto y sexto en la lista de Diputados. En paralelo, Milei impulsa nombres propios para el Senado y para los primeros lugares de la lista en Diputados, entre ellos economistas afines con alta exposición en redes.
Mientras la tensión se traslada ahora a la definición de candidaturas, el pacto en CABA ya está sellado. Pero la falta de foto entre sus figuras más visibles sigue siendo el símbolo más claro del delicado equilibrio de esta alianza.
FS