08/08/2025 - Edición Nº913

Judiciales

El veredicto se conocerá el miércoles

El fiscal pidió 20 años de prisión para el exmarido de Julieta Prandi por abuso sexual agravado

08/08/2025 | Durante los alegatos finales, el fiscal y los abogados de la modelo coincidieron en la gravedad de los hechos denunciados y solicitaron penas severas. La defensa, en cambio, cuestionó el proceso y pidió la absolución.



En la etapa final del juicio contra Claudio Contardi, expareja de Julieta Prandi, el fiscal del caso solicitó una condena de 20 años de prisión por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado. La acusación se basa en múltiples hechos cometidos durante la convivencia de la pareja, en un contexto de violencia física, psicológica y patrimonial.

El alegato del fiscal fue categórico al destacar la contundencia de las pruebas periciales y científicas que, a su entender, validan el testimonio de Prandi. También resaltó el aislamiento social y emocional que vivió la víctima y consideró que el acusado aprovechó un alto grado de vulnerabilidad.

La querella, representada por Javier Baños y el abogado Fernando Burlando, acompañó el planteo de culpabilidad y solicitó una pena aún más elevada: 50 años de prisión. Baños calificó al imputado como “extremadamente peligroso” y habló de un calvario judicial de cinco años por parte de la modelo. Para Burlando, el daño sufrido por Prandi fue “horroroso” y reflejó un accionar “terrorífico” por parte del acusado.

Del otro lado, la defensa de Contardi, a cargo de Claudio Nitzcaner, reiteró su pedido de nulidad del proceso, sostuvo que existieron exageraciones en los testimonios y cuestionó la motivación de la denuncia, vinculándola al conflicto por el régimen de visitas de los hijos. El letrado pidió la absolución o una condena mínima, en caso de considerarse culpable.

El tribunal, integrado por los jueces Lucía Leiro, Daniel Rópolo y Mariano Aguilar, deberá ahora resolver el caso y definir la pena. Mientras tanto, Prandi siguió el tramo final del juicio acompañada por su familia y detrás de un biombo que pidió para evitar el contacto visual con su exmarido.