
La referente del Frente de Izquierda y candidata a diputada, Myriam Bregman, lanzó una fuerte acusación contra los abogados que defienden a la empresa de electricidad Secco, vinculándolos directamente con la defensa de genocidas y con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Bregman identificó a Ricardo Saint Jean y Edgar Schiavone como los abogados detrás de la estrategia legal de la empresa, resaltando sus trayectorias y vínculos oscuros. Saint Jean es hijo del gobernador bonaerense durante la última dictadura, Ibérico Saint Jean, y forma parte de la Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia, un grupo que históricamente ha defendido a represores y coordinado acciones para facilitar su liberación.
Por su parte, Schiavone, socio de Saint Jean, es conocido por haber defendido a acusados vinculados al centro clandestino de detención La Cacha, uno de los escenarios más terribles del terrorismo de Estado.
El contexto de esta denuncia es el conflicto laboral en Secco, donde los despidos recientes provocaron protestas y enfrentamientos con la Policía Federal en la planta de San Martín. Los trabajadores reclaman la reincorporación y denuncian medidas ilegales por parte de la empresa.
El Ministerio de Trabajo bonaerense, a cargo de Walter Correa, dictaminó que las acciones de Secco fueron ilegales y ordenó la reincorporación inmediata de los empleados despedidos. Sin embargo, la empresa respondió con una denuncia penal y se presentó como querellante, intensificando la tensión.
Bregman señaló que esta pelea no es solo una disputa laboral, sino una cuestión de justicia que va más allá: “Debemos pelear para que los trabajadores recuperen sus puestos y derechos conculcados”, concluyó la referente, al tiempo que advirtió sobre la complicidad entre sectores empresariales, legales y políticos que buscan mantener estructuras represivas en funcionamiento.