El peronismo de Santa Fe al borde de la ruptura: Rossi y el Evita no ceden

A cinco días del cierre de listas, el peronismo de Santa Fe se encuentra al borde del quiebre. Agustín Rossi y Eduardo Toniolli, los dos principales nombres para encabezar la boleta, no logran acercar posiciones. A Rossi le critican su largo historial de derrotas provinciales, mientras que al diputado del Movimiento Evita le cuestionan no tener el peso electoral necesario para competir.

Cada sector armó su juego: tanto Rossi como Toniolli ofrecieron el segundo lugar al kirchnerismo, pero La Cámpora exige primero un esquema de unidad antes de discutir lugares. Desde el cristinismo advierten que, si no hay acuerdo, jugarán la carta de Florencia Carignano, diputada y referente camporista que podría renunciar anticipadamente para volver a postularse, una jugada similar a la que evalúa Karina Milei con Romina Diez.

Carignano, conocida por sus cruces con Lilia Lemoine en Diputados, tiene además una suplente de peso: María de los Ángeles Sacnun, exsenadora cercana a Cristina Kirchner, quien ocuparía su banca en caso de renuncia.

Rossi cuenta con el respaldo del presidente del Frente Renovador, Diego Giuliano, y del senador Armando Traferri, pero enfrenta resistencia de intendentes, jefes comunales y gremios que consideran agotada su figura. Mientras, el senador Marcelo Lewandowski llama a pensar más allá de octubre y proyectar hacia 2027.

En paralelo, el exgobernador Omar Perotti no logró frenar en la Justicia el aval al congreso partidario y al armado electoral. Con ese revés, su candidato Roberto Mirabella amenaza con competir con una lista por fuera del PJ.

La cuenta regresiva para el cierre de listas promete una definición a todo o nada que podría fracturar definitivamente al peronismo santafesino.