
Un hombre perdió su billetera y su celular mientras viajaba en un taxi. Al día siguiente, la víctima detectó consumos no autorizados en distintas plataformas y comercios por un monto superior a un millón y medio de pesos a través de sus tarjetas de crédito y débito. La denuncia de la víctima dio inicio a una investigación por parte de la Fiscalía PCyF 5 Especializada en Ciberfraudes, a cargo de Miguel Ángel Kessler.
El fiscal ordenó una serie de medidas para identificar a los responsables. Se enviaron oficios a comercios, bancos y procesadores de pago para obtener registros fílmicos, comprobantes de compra y datos de los beneficiarios. El análisis de las imágenes de las cámaras de seguridad permitió establecer que el estafador se trasladaba entre comercios a bordo de un vehículo ploteado como taxi, pero que no contaba con la habilitación correspondiente.
La empresa Mercado Pago también colaboró en la investigación. Se detectaron transferencias vinculadas a los consumos fraudulentos, lo que permitió identificar a un usuario que, el mismo día de los hechos, transfirió los fondos a otra cuenta bancaria.
Con la colaboración del Registro Nacional de las Personas (RENAPER) y la Policía de la Ciudad, se cotejaron las imágenes de las cámaras con las bases de datos de identidad, lo que permitió confirmar la identidad del sospechoso y localizarlo en un domicilio en la localidad de Glew, provincia de Buenos Aires.
Con todas las pruebas recabadas, el fiscal Kessler solicitó una orden de allanamiento al Juzgado 11, la cual fue aprobada. En el operativo, se encontró al investigado, un hombre de 43 años, y se secuestraron 18 tarjetas de crédito, 6 de débito, 6 dispositivos POS, 4 teléfonos celulares, 13 documentos de identidad y dinero en efectivo.
El hombre fue imputado por el delito de defraudación con tarjeta de crédito o débito obtenida ilegalmente, según el artículo 173, inciso 15, del Código Penal.