
La Fórmula 1 está en receso pero no exenta de polémicas. Esta vez vuelve a estar en el centro del debate el rol de Flavio Briatore, la figura que lidera desde hace meses la dirección del equipo Alpine, cuyo uno de sus pilotos es el argentino Franco Colapinto.
Las críticas llegaron justamente por uno de sus exprotagonistas: Ralf Schumacher. El germano, hermano del histórico Michael Schumacher, fue contundente en sus declaraciones y cuestionó el estilo de liderazgo de Briatore, recomendando un cambio de rumbo en la gestión deportiva de la escudería.
“Creo que la época de figuras como Flavio ha terminado. Se necesitan personas con habilidades técnicas en la cima, alguien como Christian Horner. Flavio puede ayudar como organizador o creador de redes, pero debería ceder el control de las decisiones deportivas” dijo Ralf Schumacher.
La declaración apunta directamente a la presencia de Briatore en Alpine, una figura que ha generado controversia tras su regreso como asesor ejecutivo en 2024, a raíz de su papel central en el escándalo ‘Crashgate’ de 2008.
A sus 75 años, Briatore fue expulsado de la F1 tras aquel episodio pero, en los últimos meses, volvió a tener una gran influencia en la gestión del equipo francés, ahora bajo el mando de Luca de Meo.
El estado de Alpine en el campeonato de esta temporada es, en términos deportivos, preocupante. Solo Pierre Gasly logró sumar algunos puntos, mientras que Franco Colapinto todavía no tiene resultados que garanticen su continuidad en el equipo para 2026. Desde la escudería explicaron que el argentino, con contrato multianual, seguirá en Alpine, aunque su puesto no está garantizado: “La decisión dependerá de su rendimiento”.