
La jornada electoral en Bolivia dejó un resultado histórico: el Movimiento al Socialismo (MAS), que gobernó durante casi dos décadas bajo la figura de Evo Morales, sufrió un duro castigo en las urnas y quedó fuera de la segunda vuelta presidencial. Los datos preliminares ubican en primer lugar a Rodrigo Paz Pereira con un 31,6% de los votos, seguido por el expresidente Jorge “Tuto” Quiroga con 27,1%. Ambos se enfrentarán en un balotaje que marcará el rumbo político del país.
El tercer lugar lo ocupa Samuel Doria Medina con 19,5%, confirmando su peso en la oposición pero sin alcanzar la instancia decisiva. Muy por detrás aparece el candidato oficialista Andrónico Rodríguez, apenas con 8,2%, reflejo del desgaste del MAS y del hartazgo ciudadano frente a un modelo socialista que perdió legitimidad. El fracaso también golpea a figuras como Eduardo del Castillo (3,2%) y otros aspirantes menores.
Hijo del histórico presidente Jaime Paz Zamora, Rodrigo Paz Pereira representa una opción de renovación desde el Partido Demócrata Cristiano (PDC). Con base en Tarija y un perfil pragmático, Paz ha logrado articular apoyos regionales y proyectarse como figura nacional. Su discurso enfatiza la necesidad de modernizar el Estado boliviano, dejar atrás la confrontación ideológica y recuperar la confianza internacional. Su pase al balotaje lo convierte en el favorito de sectores empresariales y clases medias urbanas.
Este 17 de agosto vamos a ganar. Agradecido con todas las personas, hermanos, hermanas, que nos acompañaron en nuestro cierre de campaña en la ciudad de #ElAlto #Bolivia #elecciones2025 #cierredecampaña #pdc #victoria #rodrigopaz pic.twitter.com/U7A8ppWKUK
— Rodrigo Paz Pereira (@Rodrigo_PazP) August 11, 2025
El expresidente Jorge “Tuto” Quiroga (2001-2002) reaparece como contendiente de peso, apoyado por la plataforma LIBRE. De trayectoria conservadora y con experiencia internacional, Quiroga se presenta como el candidato capaz de reordenar la economía y de romper definitivamente con la herencia del MAS. Su segundo puesto con más del 27% demuestra que mantiene un electorado sólido en occidente y en sectores críticos del populismo socialista.
El dato más significativo de la elección es la caída del Movimiento al Socialismo, que apenas supera el 8%. Lejos quedaron las épocas en que Evo Morales y su partido dominaban el panorama político con mayorías absolutas. La figura de Andrónico Rodríguez, apadrinado por Morales, no logró seducir ni siquiera a la base dura del oficialismo, en un contexto marcado por denuncias de corrupción, división interna y desgaste del modelo estatista.
Este resultado confirma lo que muchos analistas anticipaban: el MAS ya no es la fuerza imbatible que supo ser y enfrenta un proceso de declive acelerado. Para gran parte de la ciudadanía, el ciclo del socialismo quedó atrás, castigado por promesas incumplidas y un liderazgo que no logró renovarse.
Llegó el día, #17Ago, vamos todos a votar.#BoliviaVota pic.twitter.com/ReikrLPoOH
— Tuto Quiroga (@tutoquiroga) August 17, 2025
La segunda vuelta enfrentará a dos figuras distintas pero unidas en un punto: poner fin a la hegemonía del MAS. Rodrigo Paz y Tuto Quiroga simbolizan la oportunidad de un nuevo capítulo político en Bolivia, alejado del populismo y el socialismo que dominaron los últimos 20 años. La derrota oficialista abre el camino a un reordenamiento profundo del sistema político, con un mensaje claro de las urnas: los bolivianos quieren cambio y han dicho basta al pasado reciente.