
El esquema prevé cinco jornadas de paro parcial los días 22, 24, 26, 28 y 30 de agosto, en dos franjas horarias críticas: de 13 a 16 horas y de 19 a 22 horas. En esos lapsos, los controladores suspenderán autorizaciones y gestión de planes de vuelo, lo que afectará principalmente los despegues de aeronaves.
Desde el gremio señalaron que la decisión responde a la “persistente negativa de las autoridades de presentar una propuesta salarial decente”, tras varias audiencias sin avances con la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA).
La empresa estatal, en tanto, reconoció que el conflicto “viene de larga data” y aseguró haber hecho “propuestas concretas”, aunque sin lograr un acuerdo. Aclararon además que las medidas no afectarán vuelos sanitarios ni el servicio de Búsqueda y Salvamento Aeronáutico (SAR).
Con más de 1.200 vuelos semanales en el espacio aéreo argentino, el plan de lucha podría provocar demoras y reprogramaciones en vuelos de cabotaje e internacionales en plena temporada alta de viajes.
ND