24/08/2025 - Edición Nº929

Deportes


En el último suspiro

Racing se lo dio vuelta a Peñarol con alma copera y está en cuartos de la Libertadores

20/08/2025 | La Academia venció 3-1 al equipo uruguayo en Avellaneda, revirtió el 0-1 de la ida y se clasificó con un gol agónico de Franco Pardo. Maravilla Martínez fue figura con un doblete.



En una noche cargada de tensión y épica, Racing mostró personalidad, juego y eficacia para superar a Peñarol en el Cilindro y avanzar a los cuartos de final de la Copa Libertadores. El equipo de Gustavo Costas se impuso 3-1 en la vuelta con dos goles de Adrián "Maravilla" Martínez y uno de Franco Pardo en tiempo de descuento, revirtiendo así el 0-1 sufrido en Montevideo. 

Desde el arranque, Racing salió decidido a cambiar la historia. La buena presión de todas sus líneas provocó a los 4 minutos el primer error de la defensa uruguaya: recuperación, pase de primera para Almendra y el volante sacó un potente disparo que rozó el palo derecho del arquero Cortés.

Sin embargo, la ansiedad por el primer grito no iba a esperar demasiado. Apenas dos minutos más tarde la Academia tuvo peligroso tiro libre a su favor: centro preciso de Rojas, cabezazo al medio de Marcos Rojo y luego de unos rebotes, golazo de Maravilla Martínez para el delirio de todo el Cilindro. Ahora sí, serie empatada y a soñar con el segundo.

Peñarol, sorprendido, no logró reaccionar hasta los 13', cuando una media vuelta de Silvera hizo enmudecer a todo el estadio. El disparo, que se fue picando despacito, logró puntearlo con los dedos Gabriel Arias y evitó el primero de la visita. Aunque un minuto más tarde Herrera cabeceó solo un córner desde la derecha y estampó el 1-1 en la red del Presidente Perón.

Desde allí, el partido cambió y se volvió de ida y vuelta, con cada chapoteo de los botines en el césped mojado que dificultaba por momentos la distribución de la pelota. A los 16' y 18' el Carbonero volvió a insistir con tiros de Silvera y Sosa, en lo que fue su mejor pasaje del primer tiempo. 

A los 32' vino una de las jugadas polémicas del partido, ya que un centro de Gabriel Rojas encontró a Marcos Rojo con un frentazo al arco que hizo recordar al defensor del Mundial 2014. Todo Racing festejaba, y hasta Costas se había olvidado por un momento del apellido prohibido, pero los jugadores de Peñarol se le fueron encima al árbitro colombiano Wilmar Roldán para protestar una falta previa, que tras cotejar la jugada en el VAR, anuló el gol por empujón del exjugador de Boca.

Segundo tiempo épico

"Tarda en llegar, pero al final hay recompensa" decía en una de sus grandes canciones Gustavo Cerati junto a Mercedes Sosa, una tema que se definía como "Zona de promesas", igual que lo que se insinuaba en el verde césped de Avellaneda. 

Y el segundo gol tardaba, sí, tanto para el equipo de Gustavo Costas como para el de Javier Aguirre. Los dos intentaban con algunos cambios torcer el marcador, hasta que a los 79 minutos el juez cobró penal para Racing. Para algunos fue claro, para otros discutible, pero el brazo de Emanuel Gularte se apoyó en la nuca de Maravilla y el 9 cayó en el área chica (aunque con un poco de exageración). El VAR no llamó al juez, por lo que validó la jugada y el goleador convirtió en locura el 2-1 para el local.

Ya casi no quedaba nada del encuentro, sólo los hipotéticos penales. Por eso a los 90' los entrenadores mandaron a calentar a sus mejores pateadores y arqueros en caso de que todo se definiera desde los 12 pasos. No obstante, el fútbol les tenía preparada una sorpresa: en el último minuto del tiempo de descuento, un gran centro de Martirena desde 35 metros buscó a Franco Pardo, quien entró en soledad por el fondo de la defensa de Peñarol y logró con un cabezazo el 3-1 tan deseado. Con lluvia, con épica, con sufrimiento. Bien a lo Racing.