
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, defendió hoy al ministro de Salud, Mario Lugones, y descartó que deba dejar su cargo en medio de la polémica por el suministro de fentanilo contaminado que provocó 87 muertes confirmadas en distintos hospitales del país. Según Francos, el funcionario “no tiene ninguna responsabilidad” y el tema está siendo investigado por la Justicia.
“Está tratando el tema la Justicia. El juez Kreplak está investigando junto a los fiscales. El ministro Lugones tiene perfectamente en claro cómo es el tema, está colaborando y tomó medidas”, afirmó Francos en declaraciones radiales. Subrayó además que la crisis se originó en un laboratorio privado, HLB Pharma, y señaló que la investigación judicial apunta a irregularidades en la gestión del empresario García Furfaro.
La defensa del Gobierno busca cerrar filas frente a las críticas públicas, entre ellas las del conductor Alejandro Fantino, quien pidió la renuncia del ministro por considerar que la cartera sanitaria no actuó con la rapidez necesaria.
Francos remarcó que el ministerio ya trabaja coordinadamente con la Justicia y que se iniciarán los sumarios correspondientes si es necesario.
Un informe forense confirmó la presencia de fentanilo contaminado en 12 de las 20 historias clínicas analizadas, con un nexo causal que agravó las condiciones de los pacientes, muchos de ellos con múltiples comorbilidades. Los análisis se realizaron en hospitales y sanatorios de Rosario, La Plata, Santa Fe y Entre Ríos, y se centraron en el lote 31202 adulterado con bacterias Klebsiella pneumoniae y Ralstonia pickettii.
Franco enfatizó que la investigación judicial es clave para determinar responsabilidades y que el foco del Ejecutivo sigue siendo garantizar la colaboración con la Justicia y contener el impacto sanitario y político del caso.
FS