
El caso de Lian Flores, el pequeño de tres años cuyo paradero se desconoce desde el 22 de febrero en la localidad cordobesa de Ballesteros Sud, continúa sin resoluciones ni detenidos, a pesar de los múltiples operativos desplegados en estos seis meses.
El abogado de la familia, Darío Baggini, reconoció que “no tienen grandes avances” en la investigación y que los nuevos procedimientos responden más a protocolos que a pistas concretas. “Este jueves comenzó un rastrillaje exhaustivo con perros y allanamientos, del cual aún no tenemos los resultados”, explicó.
El letrado adelantó que “se van a concentrar en el cortadero de ladrillos y el campo de atrás”, aunque aclaró que la medida no responde a nuevos indicios. “Aparentemente no lo hacen con pistas nuevas, sino por protocolo y para descartar errores”, añadió.
Baggini, que desde el inicio acompaña a los padres de Lian en la búsqueda, remarcó que pese a la falta de resultados no cesarán en sus reclamos: “No bajaremos los brazos”. En ese sentido, insistió en que se presentaron diversas solicitudes de medidas judiciales para reactivar la investigación.
Hasta el momento, no hay testigos presenciales ni pruebas firmes que permitan reconstruir qué sucedió la tarde en que se le perdió el rastro al niño. Esa falta de información se convirtió en uno de los principales obstáculos para los investigadores, que tampoco han podido establecer líneas de trabajo sólidas.
La familia, en tanto, mantiene su pedido desesperado. Cada aparición pública de los padres de Lian está marcada por un reclamo: que no se detenga la búsqueda y que se actúe con la rapidez necesaria para esclarecer un hecho que conmociona a toda la comunidad.
A seis meses de la desaparición, la incertidumbre y la falta de respuestas siguen marcando un caso que mantiene en vilo a Córdoba y al país.