
Paraguay dio un paso trascendental en la defensa de la seguridad regional. El presidente Santiago Peña firmó el Decreto N.º 4.435, que declara al Cartel de los Soles, vinculado al régimen de Nicolás Maduro, como organización terrorista internacional. Con esta decisión, el Gobierno reafirma su compromiso con la democracia, el Estado de derecho y la lucha contra el narcotráfico transnacional.
La medida, solicitada por el Senado paraguayo el pasado 13 de agosto, coloca al país en sintonía con Estados Unidos y otras naciones aliadas que ya han tomado la misma postura. El decreto no solo representa una acción jurídica, sino también una demostración de que Paraguay está dispuesto a asumir un rol protagónico en la defensa de la región frente al crimen organizado.
El Cartel de los Soles ha sido señalado por organismos internacionales como un entramado criminal que opera con respaldo de sectores militares venezolanos, participando en narcotráfico, contrabando y lavado de dinero. La declaración de Paraguay lo ubica en la misma categoría que las principales amenazas globales a la seguridad.
Para Peña, el decreto es una señal de liderazgo político que trasciende las fronteras nacionales. No se trata solo de proteger al pueblo paraguayo, sino de enviar un mensaje claro a toda América Latina: el crimen organizado no tendrá refugio en la región.
La decisión de Paraguay fue celebrada por sectores que ven en este paso una contribución directa a la estabilidad democrática y la cooperación internacional en seguridad. Países como Guyana y Ecuador ya habían advertido sobre el impacto del Cartel de los Soles en la región, y el alineamiento de Asunción fortalece la respuesta continental contra el narcoterrorismo.
Además, la medida posiciona a Paraguay como un socio confiable en la agenda internacional de seguridad, consolidando sus vínculos estratégicos con Estados Unidos y otras democracias occidentales.
La declaración del Cartel de los Soles como grupo terrorista no es solo un acto administrativo: es un golpe político de alto impacto que reafirma la voluntad del Gobierno de Santiago Peña de defender la soberanía nacional y actuar con decisión frente a amenazas externas.
Con este paso, Paraguay proyecta una imagen de firmeza y compromiso, demostrando que, en la batalla contra el narcotráfico y el terrorismo, la región cuenta con un aliado decidido y valiente.