27/08/2025 - Edición Nº932

Internacionales

Tensiones coloniales

Malvinas: billete de Carlos III genera rechazo en Argentina

24/08/2025 | El lanzamiento de una nueva serie con la imagen del monarca británico es visto como un gesto colonial que Argentina rechaza y denuncia en foros internacionales.



La emisión de nuevos billetes en las Islas Malvinas, con la imagen de Carlos III, ha generado una fuerte reacción política en la Argentina. Mientras Londres lo presenta como un símbolo de continuidad y modernización, en Buenos Aires se interpreta como una provocación colonial en un territorio en disputa reconocido por la ONU como pendiente de descolonización.

El lanzamiento oficial, realizado el 14 de agosto, coincidió con el llamado "Día Nacional de las Falklands", fecha que Argentina no reconoce. Para el Gobierno argentino, la emisión monetaria no es un gesto inocente: se trata de una maniobra para reforzar la presencia británica en el Atlántico Sur, en abierta contradicción con las resoluciones internacionales que instan a negociar la soberanía.

Un diseño con carga política

Los nuevos billetes incluyen al monarca británico acompañado de imágenes de la fauna y flora local. Mientras en Londres se destacan como un homenaje a la identidad isleña, en Argentina se subraya que esta iconografía busca disfrazar con elementos culturales un control colonial ilegítimo. La inclusión del retrato real es vista como un intento de reafirmar simbólicamente la autoridad británica sobre un territorio usurpado.

Diversos analistas señalan que esta acción forma parte de una estrategia más amplia de Londres: consolidar su soberanía mediante símbolos cotidianos que circulen en la vida diaria de los isleños, sin atender al reclamo histórico argentino ni al mandato de las Naciones Unidas de avanzar en negociaciones bilaterales.


Para Argentina, el billete en Malvinas es símbolo de ocupación y no de identidad.

Reacción argentina y regional

El Gobierno argentino emitió un comunicado denunciando el hecho como un nuevo acto de colonialismo. Cancillería subrayó que "ningún billete ni gesto unilateral podrá alterar la realidad jurídica: las Malvinas son argentinas". Además, se anticipó que el tema será planteado en el Comité de Descolonización de la ONU y en foros regionales como la CELAC y el Mercosur.

En América Latina, la medida también ha despertado críticas. Gobiernos aliados de la región han reiterado su apoyo a la postura argentina, denunciando la vigencia de símbolos coloniales en pleno siglo XXI y alertando sobre las consecuencias para la estabilidad regional.


Con Carlos III en los billetes, Argentina reafirma su reclamo sobre las Malvinas.

Una identidad en disputa

Más allá de la coyuntura diplomática, el billete se convierte en un símbolo de la disputa identitaria que atraviesa a las Malvinas. Para los isleños que se reconocen británicos, es un gesto de orgullo y pertenencia. Para Argentina y gran parte de la región, es la reafirmación de un proceso colonial que impide a la población alcanzar una verdadera autodeterminación, ya que la ocupación británica condiciona el ejercicio de ese derecho.

El episodio demuestra que la disputa no solo se libra en el terreno diplomático o militar, sino también en el plano simbólico y cultural. Argentina mantiene firme su reclamo y utiliza cada acto unilateral británico como evidencia del carácter ilegítimo de la ocupación.

Verguenza simbólica 

El nuevo billete de Carlos III en las Malvinas no es un mero objeto de circulación monetaria: es un instrumento político que busca afianzar la narrativa colonial británica. Para Argentina, lejos de debilitar su reclamo, este tipo de medidas refuerza la legitimidad de su posición en los foros internacionales.

La controversia confirma que la cuestión Malvinas sigue plenamente vigente. Cada gesto unilateral del Reino Unido sirve para recordar que el conflicto de soberanía permanece abierto y que Argentina no renunciará a su reclamo histórico sobre las islas.