
El entrenador riojano Ramón Díaz, que había llegado en julio, dejó el cargo de entrenador de Olimpia de Paraguay, tras una derrota por 2 a 0 frente a General Caballero.
Ramón Díaz tuvo un paso fugaz y repleto de incertidumbre. Tras apenas siete partidos dirigidos, el técnico argentino decidió presentar su renuncia definitiva, en medio de una serie de malos resultados y una derrota reciente.
El riojano asumió en el mes de julio tras la salida de Fabián Bustos, en un panorama marcado por expectativas de equilibrio y resultados inmediatos. En su debut, logró un triunfo y una igualdad en los primeros partidos, pero luego llegaron cuatro duelos sin victorias.
Tras la caída en la última fecha, Ramón y su hijo Emiliano, asistente técnico, decidieron dar un paso al costado. En una conferencia de prensa, Emiliano expresó: “Agradecemos a toda la dirigencia y a los jugadores. Lamentablemente, las cosas no se dieron como queríamos. Somos los únicos responsables. Nos seguiremos viendo porque vivimos acá, y las cosas no se dieron como esperábamos”.
El Pelado, que supo dirigir a clubes como River, San Lorenzo e Independiente, además de la selección paraguaya y experiencias en Brasil, justificó su salida en la necesidad de evitar mayores complicaciones, y resaltó que, en un club con historia y jerarquía como Olimpia, los resultados deben ser inmediatos.
Su gestión fue tan corta que, en comparación, solo una vez en sus 30 años como DT el ciclo en un club fue aún menor: en 2018, con el Al-Hilal de Arabia Saudita, donde fue despedido luego de apenas cuatro partidos (tres derrotas y un empate).