Puerta a puerta
29/08/2025 - Edición Nº934
Deportes
Italia
La inédita protesta en San Siro que une a Inter y Milan: ¿qué la motivó?
26/08/2025 | Los ultras de los clubes se unieron en rechazo a las prohibiciones y aumentos de entradas.
La Curva Sur, la barra del Milan.
El comienzo de la temporada 2025 de la Serie A de Italia quedó marcado por un escenario inédito en San Siro: las barras bravas de Inter y Milan decidieron manifestarse en silencio, sin canciones ni banderas, como muestra de rechazo a las restricciones y decisiones de los dirigentes.
La tensión entre las hinchadas y los clubes se evidenció con la protesta, que rápidamente se viralizó en redes sociales y en el fútbol europeo.
La protesta silenciosa en la cancha y en las redes
Todo empezó cuando los clubes decidieron restringir el acceso de ciertos hinchas y prohibir diversas banderas en el estadio. La respuesta de los hinchas fue contundente: durante el último partido del Milan frente a Cremonese, las tribunas permanecieron en silencio total, sin cánticos, sin banderas y con los hinchas con las caras cubiertas.
La Curva Sud, los más pesados de la hinchada del 'Rossonero', explicaron en redes sociales que "Casi todas las pancartas antiguas están prohibidas. Existe una lista negra con prohibición de abono en el segundo anfiteatro".
"Por 'orden público' nos prohíben abonarnos en esa zona, pero si conseguimos una de las pocas entradas disponibles para cada partido en el mismo sector, de repente el problema de orden público desaparece. ¡Una locura!", completaron.
La Curva Nord, la barra del Inter.
Por su parte, la Curva Nord del Inter comunicó que no irán al estadio hasta nuevo aviso, y también rechazaron los aumentos injustificados en los precios de las entradas y las restricciones burocráticas: “No pedimos privilegios, pedimos que San Siro vuelva a ser un estadio pensado para la gente, como siempre fue en nuestra historia”.
La lucha por la identidad y la tradición
La protesta de los hinchas refleja el sentir de una parte importante del fútbol italiano, que siente que las reglas y la autoridad se imponen sobre la gente, alejándose de la pasión y la espontaneidad que caracterizó siempre a las grandes hinchadas de Europa.
La tensión se agudizó en un contexto en que, en los últimos años, las restricciones y los aumentos de precios en las entradas han provocado una disminución en la presencia de público y una creciente insatisfacción en las tribunas, un fenómeno que también se da en Inglaterra.
