
Las recientes declaraciones de Henrique Capriles en CNN han despertado fuertes críticas por lo que muchos consideran un acto de complacencia hacia el régimen de Nicolás Maduro, señalado internacionalmente por la represión, la persecución política y la violación sistemática de los derechos humanos. En una entrevista con Isa Soares, el excandidato opositor dijo que “los venezolanos no sabemos quiénes integran el Cartel de los Soles” y exigió a Estados Unidos mostrar pruebas públicas sobre las acusaciones de narcotráfico contra la cúpula chavista.
Aunque Capriles insistió en que en Venezuela no hay democracia, su mensaje fue interpretado como una defensa indirecta de los responsables de crímenes y abusos, en un momento en el que el chavismo enfrenta sanciones internacionales y denuncias por delitos de lesa humanidad. Para los críticos, poner en duda investigaciones judiciales y evidencias ya presentadas en cortes estadounidenses es darle oxígeno a un régimen criminal.
El contexto no deja lugar a interpretaciones ingenuas. Estados Unidos ha acusado formalmente a Maduro y a su círculo militar de liderar operaciones de narcotráfico a través del llamado Cartel de los Soles. Además, la ONU y organizaciones de derechos humanos han documentado ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias y torturas bajo el régimen chavista. Que un opositor con trayectoria como Capriles relativice estas denuncias supone, para muchos, un retroceso en la lucha por la verdad y la justicia en Venezuela.
La reacción en redes fue inmediata. Dirigentes y ciudadanos lo acusaron de traicionar la causa democrática y de enviar un mensaje ambiguo en medio de una escalada de tensiones entre Estados Unidos y el chavismo. Sus palabras fueron calificadas como incoherentes: por un lado critica la falta de democracia, y por el otro parece minimizar la mayor acusación criminal que pesa sobre los jerarcas del régimen.
‼️🇻🇪 | Henrique Capriles defendió en CNN al régimen de Maduro afirmando que “los venezolanos no sabemos quiénes integran el Cartel de los Soles”. pic.twitter.com/rvgATHwA26
— Visegrád24 (ES) (@visegrad24es) August 29, 2025
El costo político para Capriles puede ser alto. La oposición venezolana ya sufre fragmentación y pérdida de credibilidad; declaraciones como estas solo refuerzan la narrativa oficialista de que las denuncias internacionales carecen de sustento. Para sus detractores, Capriles se comporta más como un vocero involuntario del chavismo que como un líder opositor comprometido con la libertad.
La entrevista en CNN dejó en claro que Capriles eligió alinearse, consciente o no, con un régimen señalado por violaciones graves a los derechos humanos y por vínculos con el narcotráfico. En lugar de mantener una postura firme contra Maduro, sus palabras relativizaron uno de los mayores crímenes atribuidos al chavismo. En un país que clama por justicia, esta ambigüedad lo acerca más a la sombra del régimen que a la luz de la oposición real.