04/09/2025 - Edición Nº940

Entretenimiento

Terror

De Jordan Peele a John Krasinski: por qué funciona la transición de la comedia al terror

02/09/2025 | Hablamos con Cristian Ponce, director de La frecuencia Kirlian e Historia de lo oculto.



La hora de la desaparición fue el último gran ejemplo y el que dispara la pregunta de por qué funciona tan bien la transición de la comedia al terror. Porque podemos pensar en ejemplos como los de Jordan Peele y John Krasinski, dos de los nuevos referentes del mundo del terror gracias a obras como ¡Huye! y Un lugar en silencio, respectivamente, con orígenes en el mundo del humor.

El caso de Zach Cregger es similar: aunque hoy lo pensemos como un director de género, su salto a la fama se dio de la mano del programa de sketches The Whitest Kids U' Know. Cuando a Cregger le preguntaron por qué funcionaba tan bien el terror, explicó que al no haber “presupuestos extravagantes” te permiten tomar más riesgos. “Creo que es una de las pocas vías para sorprenderte en el cine en este momento”, señaló. Quizás sea una respuesta que sirva para entender por qué estamos viviendo un gran momento en materia de género: se corren riesgos, no es todo un refrito de una saga o una franquicia. 


Jordan Peele dirigiendo ¡Huye!

Pero volvamos al disparador inicial: por qué coexisten tan bien comedia y terror. La forma más simple de verlo es pensándolo como dos caras de una misma moneda que dependen del timing; estirar un chiste por demás o no ubicar a tiempo el clímax en un susto pueden hacer que se pierda esa gracia. Y del mismo modo que dependen del timing, también dependen de la reacción de la audiencia

Hoy tenemos a David Gordon Green haciendo cosas como el reboot de Halloween después de su paso por Pineapple Express, o a Bill Hader (formado en Saturday Night Live) metiendo cosas de terror en Barry como en esa obra de arte llamada “Ronny/Lily”. Si miramos a la industria nacional, también tenemos nuestros casos, como el de Cristian Ponce, que de hacer comedia en Policompañeros motorizados o La obra de mi vida, pasó a tener la película de terror mejor votada de Letterboxd en 2021 por encima de obras de Edgar Wright como Last night in Soho o la secuela de Un lugar en silencio de John Krasinski: Historia de lo oculto.

Con Cristian Ponce conversamos sobre su visión sobre el estado actual del género y por qué cree que se da tan bien esta transición. “También puedo pensar que en John Landis o Joe Dante que iban y venían entre la comedia y el terror”, aseguró, antes de empezar a analizar el género en la actualidad.


Cristian Ponce.

Jordan Peele y Zach Cregger que hacían mucho sketch y siento que eran más que nada cinéfilos también, entonces todo el tiempo hay referencias o sketch que tienen que ver con el terror o con la historia del terror”, explicó Ponce, que también señaló que tenían un humor “medio border” que hace pensar que “no es que vas a tener no sé, a un comediante más light después dedicándose al al terror”. Antes de profundizar en su análisis, Cristian también hace una salvedad: la existencia de las comedias de terror. Después de aclarar que para él La hora de la desaparición no entra dentro de este subgénero sino que simplemente tiene “humor subyacente”, señala títulos como Los muchachos perdidos u Hombre lobo americano en Londres: “Son películas que combinan muy bien momentos de terror y momentos de humor a su vez”.

¿Por qué pasa esto? “Es una herramienta super clásica adelantarse a la liberación de tensión que precisan los los televidentes y tirarles un chiste para que aflojen la tensión, para que bajen la guardia y ahí después viene el susto”, explicó Ponce. Luego, aclaró que “no podés estar con una tensión constante, podés si hacés El exorcista, qué sé yo, si sos un maestro del terror, pero lo que puede pasar es que en un momento flaquee esa tensión y la gente se empieza a reír de lo que no se tiene que reír en el cine”

Ponce destacó que siempre piensa en una frase del director Russell T. Davis y el uso del humor en este tipo de relatos. Parafrasea Ponce: “Si te reís con un personaje, después te va a dar más lástima o te va a preocupar más porque empezás a generar una empatía”. Ahora, si bien destaca esa función del humor en el terror, también aclara que no hay que pasarse de rosca como, a su criterio, pasó con el segundo capítulo de It.


La hora de la desaparición.

¿Qué tienen en común los dos géneros? “Me parece que la pretensión del autor es una pretensión muy grande porque es generar una reacción fisiológica en el espectador. El terror y el humor van a reacciones extremas, que es que te rías a carcajadas o que te asustes. Y es superdifícil eso”, explicó. De hecho, señaló que es por esta razón que “es muy difícil recomendar una película de terror y una comedia” ya que “tenés que estar seguro de que el otro tiene una afinidad estética o le asustan las mismas cosas que a vos o ni hablar que le causan gracias a las mismas cosas que a vos”. En este contexto, destacó que son “dos géneros que están en los extremos, pero justamente terminan a veces pegando la vuelta y que cuando funcionan al mismo tiempo es maravilloso”.

¿Es la era dorada del terror?

Obvio que nunca vamos a dejar de ver películas de terror y para Cristian Ponce esto tiene que ver con que es “un género dentro de todo barato” y que muchas veces los realizadores se la rebuscan para contar sin mostrar. “Es un género que es barato y que es rendidor”, aseguró.

Es la pregunta que nos hacemos hace un tiempo: ¿estamos en la era dorada del terror? Mientras en el cine las franquicias de superhéroes atraviesan su peor momento y aún en los casos en los que son bien recibidas quedan muy lejos de los ingresos de antaño (Superman hizo 611 millones de dólares y quedó lejísimos del récord de Avengers Endgame que ganó 2.700 millones), el terror no para de sorprender. Películas como Pecadores, que parecen apuntadas a un público 100% norteamericano rinden de maravillas en las salas de Argentina. Ni hablar de lo hecho por La hora de la desaparición, que ya superó las 416 mil entradas vendidas.


Scream.

Sin embargo, para Ponce no se trata de encasillarlo en una época dorada. “Creo que cuesta a veces en el momento ver la importancia de determinadas películas de terror, porque también las películas de terror muchas veces impactan más a la gente más joven”, señaló, para después detallar que las décadas del 80 y del 90 no fueron elogiadas precisamente por su cine de género: “Se volvió popular y empezó a haber un montón de subproductos y franquicias y qué sé yo”. Ponce procedió: “El terror se apoya mucho en lo original. Sería imposible hacer una franquicia de películas de fantasmas, que siempre sea el mismo fantasma porque de alguna manera la gracia intrínseca del cuento de fantasmas es el policial, descubrir por qué es un fantasma. Funciona en Viernes 13, sí, porque una máquina hacer de chorizo, funciona en Pesadilla porque le dan una vuelta y cada película te decía, ‘no, pero en realidad Freddy vuelve por esto’. Pero bueno, es como que ves una película de casas embrujadas y parte de la gracia es por qué esta casa particularmente está embrujada. La repetición y las franquicias y las secuelas suelen ir en detrimento de las películas de terror”. De hecho, con Scream como referente de los 90, señaló cómo era cuestionada por los adultos que no tenían en cuenta el impacto en los más chicos. “Creo que el terror se mide por el impacto que tiene en la audiencia y se mide o se puede reconocer ese impacto a posteriori", explicó.

Para Cristian Ponce hay un detalle muy relevante para entender cómo impactan e influyen las películas de terror: los momentos de mayor ansiedad social y política. “No le viene mal al terror que esté todo para la mierda social y políticamente en el mundo, que andemos yendo para la derecha porque bueno, va a haber directores que canalicen esas ansiedades”, señaló el director de Historia de lo oculto. En este contexto, concluyó: “No sé si estamos en una época dorada, porque creo que siempre hay cosas interesantes dentro del terror. Para mí si sabés buscar siempre hay. Dentro de todo en lo que fue post-pandemia hubo muy buenas películas. Lo que sí, bueno, tenés que estar sintonizado con las ansiedades de la época porque si no te pasan por el lado”.


Historia de lo oculto.