
En la industria del fútbol, el mercado de verano del fútbol europeo es el más fuerte en materia de inversión de los clubes. Es el momento donde las ligas de América Latina pueden exportar a sus figuras.
Sin embargo, este último mercado de pases que cerró, batió un récord. La Premier League gastó cerca de 4.000 millones de dólares para fichar jugadores, según un informe de la empresa Deloitte horas después del cierre del registro.
Esta cifra supera la inversión realizada por el resto del top 5 de las ligas europeas juntas (España, Italia, Alemania y Francia).
La piedra angular en los ingresos del fútbol inglés es la comercialización de los derechos de televisión, tanto a nivel nacional como internacional. Es la liga que mejor vende sus derechos audiovisuales.
A su vez, se vieron beneficiados con la expansión de los torneos europeos: por primera vez en la historia, nueve de los clubes de la Premier van a jugar en torneos continentales esta temporada (seis en la Liga de Campeones, dos en la Europa League y uno en la Conference League).
El Tottenham, que salió 17º la temporada pasada pero está clasificado a la Champions League, pagó 63 millones de euros al West Ham por el extremo ghanés Mohammed Kudus. A su vez, el club vendedor reinvirtió 46 de esos millones en el centrocampista portugués de 21 años Mateus Fernandes, que jugaba en el Southampton.
Las grandes inversiones no son solo una posibilidad para los equipos históricos de la liga inglesa. Los equipos recién ascendidos como el Burnley, Leeds y Sunderland gastaron cada uno de ellos más de 100 millones de libras en transferencias para afrontar la Premier League.
El Sunderland, por ejemplo, desembolsó 185 millones de euros, dos más de los invertidos por el Atlético de Madrid, el club que más invirtió en jugadores en España en el último mercado de pases o 20 millones más que un gigante de LaLiga como el Real Madrid.