La polémica campaña de Sydney Sweeney fue un éxito de ventas para American Eagle

La campaña publicitaria de American Eagle protagonizada por Sydney Sweeney, conocida por su eslogan “Sydney Sweeney has great jeans” (un lema que jugaba con la palabra jeans y su homónimo en inglés, “genes”), se ha convertido en un inesperado éxito comercial a pesar de las fuertes críticas que recibió. Lanzada el 23 de julio, la iniciativa logró que la colección de ropa asociada se agotara en menos de una semana, con algunos ítems desapareciendo de las tiendas en un solo día. La compañía vio un aumento del 25% en sus acciones.

El revuelo comenzó cuando algunos usuarios interpretaron la campaña como una posible propaganda nazi encubierta, sugiriendo que el juego de palabras exaltaba la herencia blanca de la actriz como un ideal de belleza.

Esta controversia elevó la visibilidad del anuncio, llevándolo al centro del debate político nacional. Sin embargo, lejos de perjudicar a la marca, la polémica parece haberla beneficiado, con el director de marketing, Craig Brommers, destacando ante analistas que en solo seis semanas la campaña generó un impacto sin precedentes. A pesar de esto, los ingresos netos de la empresa cayeron un 1% en el segundo trimestre hasta el 2 de agosto de este año, aunque las ganancias operativas subieron un 2%.

El respaldo político llegó de manera sorprendente cuando el presidente Donald Trump intervino en el debate. El 4 de agosto, a través de su plataforma Truth Social, escribió: “Sydney Sweeney, una republicana registrada, tiene el anuncio MÁS CALIENTE que hay. Es para American Eagle, y los jeans están ‘volando de los estantes’”. Esta declaración, junto con comentarios de su equipo que calificaron la crítica como “cultura de la cancelación descontrolada”, transformó la campaña en un símbolo de la polarización cultural. Incluso el vicepresidente JD Vance se sumó, burlándose de los demócratas por su supuesta reacción exagerada.

La estrategia de American Eagle no se limitó a Sweeney. La marca también colaboró con Travis Kelce, estrella de los Kansas City Chiefs, lanzando una colección con su marca Tru Kolors justo un día después de su compromiso con Taylor Swift. Según el CEO Jay Schottenstein, estas campañas, que juntas generaron 40 mil millones de impresiones, han impulsado la marca.