Operativo en la Ruta 7
17/09/2025 - Edición Nº953
Policiales
Estaba haciendo un "pasamanos"
Cayó “La Reina”, la mujer de un narco vinculado a Los Monos que tenía pedido de captura desde mayo
05/09/2025 | Soledad M., conocida como La Reina o La Tía, fue detenida en Rosario tras una investigación del fiscal Diego Giro.
La expareja del narcotraficante Leonardo Saravia, alias “Leo Rey”, fue detenida en Rosario después de permanecer tres meses prófuga de la Justicia. Se trata de Soledad M., conocida en el ambiente como “La Reina” o “La Tía”, quien tenía un pedido de captura vigente por venta de estupefacientes a pequeña escala.
La investigación está a cargo del fiscal Diego Giro y, según está previsto, este viernes se llevará adelante la audiencia imputativa en su contra.
La detención fue ejecutada por la Policía de Seguridad Aeroportuaria, que la siguió desde la zona de La Lata, en calle Nora Lagos al 1400, hasta el cruce donde finalmente fue apresada. El Peugeot 2008 en el que se trasladaba fue trasladado hasta una estación de servicio de Pellegrini y Perú, donde los efectivos incautaron 78 mil pesos, un teléfono celular, 100 dólares y diversa documentación.
De acuerdo con la pesquisa, La Reina fue observada en varias oportunidades realizando “pasamanos” o ventas de droga al menudeo en la zona de bulevar Seguí y las vías. No es la primera vez que su nombre aparece vinculado a investigaciones por microtráfico tanto en la Justicia federal como en la provincial.
Soledad M. estaba prófuga desde mayo, cuando en un allanamiento realizado en su domicilio de Villa La Lata se habían secuestrado bochitas de cocaína, una máquina de contar billetes y anotaciones relacionadas con el comercio ilegal de drogas.
Su expareja, Leonardo Dalmacio “Leo Rey” Saravia, fue condenado en 2023 a cuatro años de prisión efectiva por portación ilegítima de arma de guerra y encubrimiento, en el marco de una causa que lo señalaba como parte de la estructura de Ariel Máximo “Viejo” Cantero, fundador de Los Monos.
En esa investigación, los fiscales lo describieron como un jugador de peso en el negocio narco de la zona suroeste y oeste de la ciudad, encargado de aprovisionar búnkeres con estupefacientes bajo la venia de Cantero y su pareja, Rosa Bibiana “Bibi” Montero.
