29/10/2025 - Edición Nº995

Internacionales

Presión coordinada

Bessent revela las medidas que cambiarán el conflicto ruso-ucraniano

11/09/2025 | Scott Bessent aseguró que Washington está dispuesto a intensificar la presión sobre Moscú, pero recalcó que el éxito depende de la unidad europea.



El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, encabezó este lunes en Washington una reunión con el enviado especial de sanciones de la Unión Europea, David O’Sullivan, como parte de una serie de encuentros destinados a fortalecer la coordinación transatlántica frente a la guerra en Ucrania. Durante dos días, funcionarios del Tesoro, la Casa Blanca y el Departamento de Estado dialogaron con la delegación europea sobre posibles medidas adicionales contra el Kremlin.

O’Sullivan lidera los esfuerzos europeos para cerrar las vías de evasión de sanciones por parte de Moscú, en especial en sectores estratégicos como la energía y las finanzas. La cita en Washington evidenció la necesidad de una estrategia unificada que impida al régimen de Vladímir Putin sortear las restricciones económicas impuestas por Occidente.

“Todas las opciones sobre la mesa”

Tras el encuentro, Bessent afirmó que Estados Unidos está preparado para aplicar “medidas enérgicas” contra Rusia, siempre y cuando exista una coordinación plena con Bruselas. Recalcó que sin la colaboración europea, las sanciones pierden efectividad frente a los mecanismos de evasión que ha desarrollado el Kremlin.

En declaraciones a la prensa y en un mensaje publicado en X, el secretario del Tesoro subrayó que “todas las opciones siguen sobre la mesa” como parte de la estrategia de la administración Trump para presionar a Moscú y facilitar negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania. Según Bessent, los canales tradicionales de negociación han mostrado ser insuficientes y requieren una dosis mayor de presión económica.

Unidad transatlántica frente al Kremlin

La administración estadounidense considera que la coordinación con la UE es fundamental no solo para restringir las exportaciones de Rusia, sino también para sancionar a compradores de petróleo ruso y actores financieros que faciliten el flujo de recursos hacia el Kremlin. Estas medidas, según Bessent, buscan cortar de raíz la capacidad de Moscú para financiar la guerra.

En paralelo, el presidente ruso, Vladímir Putin, advirtió que la presencia de tropas occidentales en Ucrania sería considerada un “objetivo legítimo” para su Ejército, lo que eleva la tensión en un escenario ya marcado por la desconfianza. La respuesta coordinada entre Washington y Bruselas busca enviar un mensaje claro: que la presión económica y diplomática sobre Moscú se mantendrá firme mientras no se avance hacia una paz negociada.

Perspectivas

Los próximos pasos dependerán de la capacidad de EE. UU. y la UE de mantener una postura común ante Rusia. Para Washington, el compromiso europeo es indispensable: solo mediante una unidad sólida y sostenida será posible cerrar las grietas que permiten al Kremlin eludir sanciones y prolongar el conflicto en Ucrania.