Camila Mercado: de Río Cuarto a grabar con Axel y llenar escenarios

La joven cantante cordobesa que está dando sus primeros pasos como gran referente de la música popular, Camila Mercado, visitó el living de NewsDigitales para celebrar el lanzamiento de su nuevo tema junto a Axel: “Por él”. Entre risas, anécdotas y confesiones, la artista habló de sus comienzos, su crecimiento profesional y los sueños que aún guarda.

Desde muy chica, la música fue su motor. “A los 10 años empecé a cantar y no sabía que tenía ese don. Mi familia siempre estuvo vinculada a la música: mi hermano es baterista y DJ, mis abuelos y tías cantaban. Un día, en una Navidad, puse una canción de Valeria Lynch y mi mamá me escuchó. Me animó a cantarle a mi abuelo y ahí empezó todo”, recordó Camila, evocando sus primeros pasos con la música.

De hobby a carrera profesional

A los 12 años ya había grabado su primer disco de folklore y luego formó una banda de cumbia cuarteto junto a su familia, tocando en eventos locales. “Por ahí mucha gente no sabe que detrás de un artista hay años de trabajo. Se ve un hit, pero el camino lleva tiempo. La experiencia te prepara para momentos como grabar con Axel o llenar un estadio”, reflexionó.

El salto grande llegó durante la pandemia, cuando empezó a trabajar con el productor Pablo Cerantoni. “Siempre lo tomé como un hobby, cantar me hacía feliz sin pensar en fama ni cifras. Hoy, después de dos años en Buenos Aires, he cantado con Los Palmeras en el Luna Park y aún me cuesta creerlo”, contó emocionada.

El sueño de cantar con Axel

El encuentro con Axel, uno de sus mayores ídolos, fue un hito que todavía le resulta increíble. “Mi productor me dijo que apuntemos alto y le escribimos al mánager de Axel. Yo ya lo había descartado, porque parecía imposible. Cuando contestaron que Axel quería grabar conmigo, no lo podía creer”, recuerda Camila.

Pero la sorpresa no terminó ahí: “Originalmente íbamos a hacer un cover, pero Axel propuso que grabáramos una canción original suya. Fue increíble porque él mismo participó en todo el proceso creativo. Estuvimos varias sesiones en el estudio, revisando la interpretación, afinando los arreglos y buscando la química perfecta entre nuestras voces. Trabajar con alguien de su experiencia me enseñó muchísimo sobre técnica, interpretación y profesionalismo”, contó la cantante.

El resultado fue “Por él”, un tema de amor que refleja tanto la esencia de Axel como el estilo fresco y emotivo de Camila. “Lo más hermoso de Axel es su humildad. A pesar de su fama, su enfoque siempre fue compartir la música y hacer que todo el proceso fuera una experiencia positiva. No importaban los números ni la repercusión; lo que realmente valía era que la canción llegara y emocionara”, agregó.

Camila confiesa que esta colaboración no solo cumplió un sueño, sino que también la hizo crecer como artista: “Aprendí a manejar los nervios, a confiar en mi voz y a entender la importancia de la preparación. Fue un momento único que voy a recordar siempre, y el tema ya está recibiendo un montón de cariño del público, lo que lo hace todavía más especial”.

Superando el bullying y la presión de las redes

Aunque su carrera hoy crece a pasos agigantados, Camila no olvida los desafíos que enfrentó en su infancia y adolescencia. “Hoy ya está superado, pero me costó mucho romper muchas barreras. En el colegio sufrí bullying y eso afectó mi manera de relacionarme y hasta de pararme en un escenario. Tenía miedo de lo que la gente iba a decir y me costaba sociabilizar”, contó.

Con el tiempo, la cantante también tuvo que aprender a lidiar con la exposición en redes sociales. “Leer comentarios destructivos fue duro. Cuando debuté en Pasión de Sábado, muchos hablaban sobre mi físico y eso golpea. Pero entendí que el problema no era mío, sino de quienes escribían. Aprendí a filtrar, a rodearme de gente que suma y a no permitir que palabras negativas definan mi camino”, reflexionó.

Para Camila, el apoyo de la familia fue clave: “Mi mamá, mi papá y mi hermano siempre estuvieron ahí. Esa contención me dio fuerza para seguir adelante y no abandonar mis sueños. Hoy puedo mirar atrás y ver que cada dificultad me hizo más fuerte y segura en el escenario”.

“Pasión de sábado”: su segunda casa

Para Camila, Pasión de sábado ya no es solo un programa: es parte de su vida cotidiana. “Todos los días paso por el estudio, voy al gimnasio y cruzo Pasión, ya es como mi casa. Todos los que trabajan ahí me tratan como familia, como si fuera su vecina”, contó.

La cantante aclaró que no vive literalmente en el escenario, como algunos podrían imaginar: “No tengo un colchón ahí al lado de la tribuna ni nada de eso. El estudio es grande, cuenta con varios espacios y todo está pensado para el equipo y para los artistas que vienen. Pero sí es cierto que paso muchas horas ahí, y me siento muy cómoda; es un lugar donde puedo ensayar, preparar los shows y sentirme en confianza”.

Camila confiesa que la rutina diaria en el estudio también le permitió familiarizarse con los grandes escenarios y aprender a manejar la presión de estar frente al público: “Ensayamos mucho para dar un buen show, para que la gente disfrute y quiera volver a vernos. Estar tantas horas en Pasión me ayudó a crecer como artista y a sentirme preparada para todo lo que viene”.

Viviendo el presente y soñando con el futuro

Más allá del presente lleno de logros, Camila Mercado tiene la mirada puesta en lo que viene. “Trato de disfrutar el presente pero también tengo muchos proyectos en mente: nuevos temas, colaboraciones y varios fit que se vienen. También sueño con llevar mi música a otras provincias y, por qué no, internacionalmente. Lo importante es seguir aprendiendo, disfrutar del proceso y poder conectar con la gente a través de la música”, contó.

La cantante asegura que su meta es consolidarse como artista integral: “Quiero crecer, pero siempre manteniendo mi esencia. Cada paso que doy lo tomo como una oportunidad para mejorar y acercarme un poco más a los sueños que tengo desde que era niña en Río Cuarto cantando frente a mi abuelo. Creo que la clave es no perder la pasión y nunca dejar de disfrutar el camino”.

Con este espíritu, Camila sigue transformando cada desafío en aprendizaje y cada escenario en un paso más hacia una carrera que promete ser larga y brillante.