14/09/2025 - Edición Nº950

Internacionales

Crisis energética

El colapso eléctrico en Cuba que paralizó al país: ¿qué sigue?

12/09/2025 | El colapso del sistema eléctrico dejó sin luz a gran parte del país y reaviva las críticas sobre la fragilidad de la infraestructura.



Cuba atraviesa nuevamente una grave crisis energética tras registrarse un apagón nacional que afectó a millones de personas en toda la isla. El corte, ocurrido esta semana, paralizó servicios básicos, interrumpió el transporte y dejó a amplias zonas del país sin acceso a electricidad durante horas.

Las autoridades confirmaron que el fallo se originó en la termoeléctrica Antonio Guiteras, la más importante del país, cuya salida imprevista desencadenó un colapso en cadena en el Sistema Eléctrico Nacional. El incidente es el quinto de este tipo en menos de dos años, lo que subraya el deterioro estructural de la red energética.

Impacto social y económico

Durante varias horas, la generación eléctrica cayó a menos del 10% de su capacidad habitual. Esto afectó a hospitales, comercios, redes de agua y comunicaciones, obligando al gobierno a activar microsistemas de emergencia para garantizar servicios esenciales.

En las calles, los ciudadanos reportaron largas filas para adquirir alimentos y dificultades para conservar productos básicos. La falta de refrigeración y transporte eléctrico ha generado un ambiente de tensión en barrios populares y zonas rurales.

Reacción oficial y promesas de recuperación

El Ministerio de Energía y Minas aseguró que se trabaja en la recuperación gradual del sistema, con brigadas técnicas desplegadas en las principales centrales del país. El primer ministro Manuel Marrero sostuvo que existe una “estrategia definida” para estabilizar la red, aunque admitió que el proceso puede extenderse varios días.

El gobierno responsabiliza a la combinación de obsolescencia tecnológica, falta de piezas de repuesto y escasez de combustible por las fallas recurrentes. También señala que las sanciones económicas complican el acceso a financiamiento y suministros.

Críticas y malestar ciudadano

Sin embargo, analistas y voces de la oposición advierten que la crisis refleja la falta de inversión sostenida en el sector energético y la dependencia casi total de plantas termoeléctricas envejecidas. El apagón ha reavivado el descontento popular y generado protestas espontáneas en algunos barrios de La Habana y Santiago de Cuba.

Expertos señalan que el país necesita con urgencia modernizar su infraestructura eléctrica y diversificar sus fuentes de energía para evitar que los apagones se conviertan en una normalidad.

El comunismo es oscuridad 

El nuevo apagón nacional confirma la fragilidad del sistema eléctrico cubano y su impacto directo en la vida cotidiana de millones de ciudadanos. Más allá de los esfuerzos oficiales por restaurar el servicio, la frecuencia de estos episodios plantea dudas sobre la capacidad del gobierno para ofrecer soluciones de fondo.

La situación coloca al país en una encrucijada: apostar a reformas estructurales en el sector energético o enfrentar el riesgo de que los apagones masivos se conviertan en un factor crónico de inestabilidad social y política.