13/09/2025 - Edición Nº949

Política

¿Fin libertario?

Milei y la encrucijada económica tras la caída electoral: Duro informe

13/09/2025 | La derrota electoral marcó un límite al programa libertario. El futuro económico se debate entre devaluación, reestructuración de deuda o una crisis cambiaria.



La contundente victoria del peronismo en la Provincia de Buenos Aires no solo redibujó el mapa político: también puso en cuestión la viabilidad del plan económico libertario.

Según el nuevo informe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO), el Gobierno perdió la “licencia social” que lo sostenía y ahora enfrenta un dilema de supervivencia entre medidas drásticas y la erosión de la gobernabilidad.

El documento subraya que, si el oficialismo insiste en sostener el programa actual, se profundizará el recurso de tasas elevadas y la venta de dólares futuros y presentes. En este esquema, el Banco Central (BCRA) quemaría hasta 20.000 millones de dólares —una cifra equivalente al último crédito del FMI— para contener la cotización, con el riesgo de que esos recursos terminen en una fuga de capitales acelerada.

El análisis advierte sobre un escenario particularmente delicado: la combinación de reservas en caída con una expansión en pesos producto de los pasivos remunerados y la emisión vía dólar futuro. Para el CESO, esta estrategia no es otra cosa que “la receta perfecta” para un estallido cambiario después de las elecciones de octubre.

La eventual salida de Luis Caputo y su reemplazo por Federico Sturzenegger, junto con la decisión de liberar el tipo de cambio, podría derivar en una espiral inflacionaria difícil de controlar. Esa alternativa, lejos de estabilizar, correría el riesgo de detonar una nueva corrida cambiaria en un contexto de fragilidad social y política.

Frente a este panorama, el informe plantea la necesidad de un giro pragmático: una transición negociada que incluya devaluación controlada y el regreso a restricciones sobre la compra de divisas. El objetivo sería evitar que la crisis escale a un nivel de ingobernabilidad que complique incluso la continuidad institucional.

Finalmente, el CESO pone en el centro del debate la deuda externa. La pregunta ya no es si habrá reestructuración, sino qué tipo de reestructuración se impondrá: una “amigable”, con compromisos a futuro más pesados; una dura, con quita de capital; o directamente el default. En todos los casos, el “experimento libertario” aparece agotado, con un horizonte que combina fragilidad política y riesgo económico.

El informe completo: