
La decisión, formalizada mediante el Decreto 652/2025, representa un duro golpe para las arcas provinciales y profundiza la tensión política entre la Casa Rosada y los mandatarios locales.
El veto se suma a los recientes rechazos a la Ley de Financiamiento Universitario y a la Emergencia en el Hospital Garrahan, en un marco de creciente confrontación entre el Poder Ejecutivo, el Congreso y las provincias.
El proyecto, sancionado el 20 de agosto, planteaba:
Distribución automática y diaria de los ATN en condiciones similares a la coparticipación.
Integración de los ATN a la masa coparticipable.
Inclusión de CABA y Tierra del Fuego en el reparto con porcentajes reconocidos.
Sin embargo, el Ejecutivo justificó el veto argumentando que los ATN fueron creados para atender “desequilibrios financieros y emergencias” y que automatizar su distribución quitaría al Gobierno la capacidad de administrarlos de manera flexible.
La decisión genera malestar en los gobernadores, que ven bloqueada una herramienta clave en un momento de fuerte restricción económica. En paralelo, el oficialismo intenta recomponer su estrategia política tras la derrota en Buenos Aires y la creación de una “mesa federal” encabezada por Guillermo Francos y el flamante ministro del Interior, Lisandro Catalán.
El veto a la Ley de ATN aparece así como un nuevo capítulo de la pulseada entre Milei y los mandatarios provinciales, que reclaman mayor previsibilidad y autonomía financiera frente a una Casa Rosada que prioriza el equilibrio fiscal por sobre los consensos políticos.
ND