
Ayer por la noche, el presidente Javier Milei, encabezó una conferencia de prensa para anunciar el envío del proyecto de ley del Presupuesto 2026 al Congreso para su tratamiento, de acuerdo con lo que establece la Constitución Nacional.
El Presidente Javier Milei presenta el Presupuesto Nacional 2026. pic.twitter.com/CYj3QnZMCK
— Oficina del Presidente (@OPRArgentina) September 16, 2025
El discurso se centró en una premisa: el equilibrio fiscal es innegociable. Pero no incluyó muchas más definiciones.
Horas más tarde, se conoció el texto completo del proyecto y allí, el Ministerio de Economía que comanda Luis Caputo realiza una serie de estimaciones macroeconómicas que parecen, de mínima, optimistas, sino directamente inviables.
1. Dólar
El tipo de cambio se estima en $1.325 en diciembre de 2025 y en $1.423 en diciembre de 2026. Asimismo, se prevé en $1.470 en 2027 y $1.488 en 2028.
Pareciera casi imposible considerando que ayer la cotización del dólar mayorista cerró en $1.462, es decir, por encima tanto de lo que el Gobierno espera para fines de 2025 y 2026, y apenas por debajo de lo que estima para dentro de dos años.
2. Inflación
El IPC anual se espera en 24,5% en diciembre de 2025. Nuevamente, resulta difícil imaginar su cumplimiento siendo que a agosto de 2025, la inflación ya acumula 19,5% en lo que va del año.
Se requeriría que los cuatro meses restantes, el IPC sea de sólo 1% mensual para cumplir la estimación. Cabe recordar que la última medición arrojó un 1,9%.
Asimismo, para 2026, se prevé que la inflación interanual desacelere a un 10,1%. Es decir, un IPC mensual de 0,8%: muy optimista.
3. Crecimiento económico
Se utiliza como escenario base un incremento del PIB de 5,4% en 2025 y de 5% anual para los años 2026 a 2028.
Anoche, Milei destacó que, de lograr consensos para reformas estructurales, esto es, laboral, previsional y tributario, Argentina podría crecer "al 7 u 8% anual de manera sostenida".
Si el presupuesto solo estima 5% anual, ¿podemos suponer que no se encararán reformas estructurales?
4. Resultado fiscal y financiero
El Presupuesto del Sector Público Nacional proyecta para el ejercicio fiscal 2026 un resultado fiscal de 1,5% del PIB, que tras el pago de intereses (1,2% del PIB), desciende a un resultado financiero superavitario de 0,3% del PIB.
La estimación resulta llamativa considerando que, en el último reporte del Fondo Monetario Internacional, se preveía un superávit fiscal de 2,2% para 2026, equivalente a los intereses de la deuda, por lo cual el resultado financiero resultaba equilibrado.
Luce muy optimista creer que hace un mes, los intereses de deuda eran de 2,2% del PBI y ahora sólo 1,2%.
5. Balanza comercial
En el proyecto de presupuesto, el gobierno reconoce que, en 2025, el déficit comercial será de USD 2.447 millones en el año. En 2026, se profundizará a más del doble (USD 5.751 millones).
Con estas estimaciones, la escasez de dólares, lejos de reducirse, se ampliará este año y el siguiente. ¿Con qué dólares entonces se prevé pagar los compromisos de deuda? Es una incógnita.
En conclusión, las estimaciones con las que se elaboró el Presupuesto 2026 lucen de difícil cumplimiento. Ahora, el proyecto deberá ser discutido en la Cámara de Diputados, donde seguramente los legisladores querrán introducir modificaciones. El gobierno puede negociar o, reproducir la lógica de "todo o nada" y prorrogar nuevamente el Presupuesto 2023.