19/09/2025 - Edición Nº955

Internacionales

Unidad progresista

El golpe del CNE al Pacto Histórico que pone en jaque la consulta

19/09/2025 | La decisión del Consejo Nacional Electoral amenaza la consulta de octubre y profundiza las divisiones internas del progresismo.



El Consejo Nacional Electoral de Colombia (CNE) tomó una decisión que sacude al panorama político: autorizó parcialmente la fusión del Pacto Histórico con partidos como el Polo Democrático, el Partido Comunista y la Unión Patriótica, pero excluyó a Colombia Humana y al movimiento Progresistas, liderado por María José Pizarro. Esta exclusión afecta directamente la consulta popular programada para el 26 de octubre, donde se definiría el candidato presidencial y las listas legislativas de la coalición.

El fallo del CNE es visto como un duro golpe para el progresismo. La exclusión de las fuerzas vinculadas directamente al presidente Gustavo Petro y a María José Pizarro pone en evidencia la fragilidad de un proyecto que buscaba consolidar un partido único de la izquierda. Para críticos del bloque, esta situación confirma que la izquierda no logra superar sus divisiones y que depende excesivamente de figuras individuales para sostener su cohesión.

Reacciones internas

Las voces de protesta llegaron de inmediato. María José Pizarro calificó al CNE como un “cónclave con intereses oscuros” y advirtió que esta decisión compromete el ejercicio democrático. Sin embargo, sectores opositores señalaron que las quejas reflejan más bien la incapacidad de la izquierda para organizarse bajo reglas claras y dentro de los márgenes institucionales.

Otros líderes del Pacto Histórico, como Susana Muhamad, Gustavo Bolívar y Gloria Flórez, coincidieron en criticar la resolución, asegurando que debilita la legitimidad del proceso electoral interno. Pero desde la otra orilla, analistas advierten que la medida deja al descubierto la falta de madurez política del progresismo, que no logra institucionalizarse ni responder a las exigencias legales que regulan la vida partidaria en Colombia.

Contexto de la decisión

El proyecto de un partido unificado de izquierda fue impulsado por Petro como herramienta para fortalecer su legado y consolidar el poder del progresismo. Sin embargo, los obstáculos han sido recurrentes: los requisitos legales y los umbrales de votación no se han cumplido en varias instancias. Para críticos del gobierno, la decisión del CNE no es una jugada política, sino la consecuencia natural de estas deficiencias.

El antecedente de las elecciones regionales de 2023, donde el Pacto Histórico perdió terreno frente a la oposición, es leído como una señal de que la coalición no logra expandirse más allá de su base dura. La exclusión actual del CNE refuerza la percepción de que el progresismo atraviesa una etapa de debilidad, justo cuando buscaba proyectar fortaleza de cara al futuro.

Riesgos para la consulta

El mayor impacto recae sobre la consulta popular del 26 de octubre, que ahora se ve amenazada por la falta de legitimidad. Sin Colombia Humana ni Progresistas, el proceso de selección de un candidato único pierde peso político y podría transformarse en un ejercicio vacío. La izquierda, en lugar de mostrar cohesión, expone sus fracturas.

En este escenario, dirigentes progresistas hablan de alternativas como consultas paralelas o acuerdos programáticos. Pero críticos sostienen que estas soluciones improvisadas no lograrán ocultar la falta de unidad real ni la debilidad estructural del bloque frente a una oposición cada vez más organizada.

La realidad al frente 

La resolución del CNE no solo refleja las barreras institucionales, sino también las limitaciones internas de la izquierda para consolidar un proyecto político estable. Lo que para unos es una maniobra política calculada, para otros no es más que la consecuencia de la falta de organización y de visión estratégica del progresismo.

De cara a las presidenciales de 2026, el panorama luce complejo. La izquierda se enfrenta a un dilema: recomponerse a pesar de la exclusión o continuar fragmentada. Lo cierto es que la decisión del CNE ha puesto en evidencia la vulnerabilidad del bloque y ha debilitado su capacidad para competir en igualdad de condiciones.