
Diputados de Unión por la Patria presentaron un proyecto de reintegro de una parte del IVA para compras de la canasta básica. La iniciativa guarda similitudes con el “Compre sin IVA” que puso en marcha Sergio Massa en el 2023.
Aquella medida incluía como beneficiarios a los trabajadores formales con ingresos de hasta 6 salarios mínimos, monotributistas, trabajadores de casas particulares, jubilados con hasta 3 haberes mínimos, los titulares de pensiones no contributivas y los beneficiarios de la AUH. La devolución era en 48 horas.
El proyecto actual indica que el reintegro no será total, sino del 50%. Se acreditaría a las 24 horas.
El universo de beneficiarios contempla a jubilaciones y pensiones por fallecimiento, en una suma mensual que no exceda el haber mínimo garantizado; asignaciones universales por hijo para protección social; asignaciones por embarazo para protección social; pensiones no contributivas nacionales, en una suma mensual que no exceda el haber mínimo garantizados; los trabajadores que presten servicios remunerados en relación de dependencia en la actividad privada o pública, siempre que el ingreso no supere la suma de seis (6) veces el Salario Mínimo, Vital y Móvil; y las trabajadoras de casas particulares.
“ARCA establecerá un régimen de reintegros para personas humanas que revistan la condición de consumidores finales, destinado a estimular comportamientos vinculados con la formalización de la economía y el cumplimiento tributario en la adquisición de productos incluidos en la canasta básica alimentaria establecida por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC)”, se señala en el texto presentado por el peronismo, que cuenta también con la firma del radical Julio Cobos.
El proyecto, a su vez, no establece cuál sería el tope del reintegro, pero aclara que debe estar incluido en los presupuestos anuales aprobados “a propuesta del Poder Ejecutivo Nacional”.
Sobre el impacto fiscal de este reintegro, se subraya: “Los números fiscales también acompañan esta lógica. En 2024, la recaudación de IVA alcanzó más de 43 billones de pesos, con una suba nominal del 190,9% interanual. Sin embargo, en marzo de 2025 el crecimiento real de la recaudación de IVA fue apenas del 1%, lo que evidencia que cuando el consumo formal se resiente, el fisco también pierde”.
“El reintegro planteado, al incentivar operaciones registradas con tarjeta de débito, favorece la formalización y amplía la base imponible, compensando parte de la inversión inicial del Estado”, completa el texto.
FA