
La semana del agro comenzó con una noticia que sacudió el tablero, como es la baja a cero en los derechos de exportación a cero en granos y subproductos. La medida fue anunciada por el vocero presidencial, Manuel Adorni y ratificada en el Boletín Oficial, a partir del Decreto 682/2025.
Con esta decisión, la Casa Rosada ratificó que espera ingresar divisas por USD 7.000 millones antes de las elecciones del próximo 26 de octubre. Tras conocerse esta noticia, las repercusiones no tardaron en conocerse, en un contexto de muchas dudas por parte del mercado y los operadores.
De cumplirse esta medida y se alcance la meta de USD 7.000 millones, el costo fiscal para el Gobierno sería de aproximadamente USD 1.000 millones. No es tema menor, sobre todo por el impacto electoral que puede generar, tras los esfuerzos del Gobierno nacional para recortar fondos a la salud pública y la educación universitaria.
Según explicó el analista Carlos Etchepare, el traslado de precios a los granos será más visible en soja, que en los próximos días podría pasar de los actuales $440.000 a unos $580.000 por tonelada. En cereales, la suba será menor, con un trigo que aumentaría de $280.000 a $315.000 y un maíz que subiría de $265.000 a $280.000 por tonelada.
Una de las primeras reacciones que se conoció tras el anuncio fue la de los exportadores. “Apoyamos toda medida que implique eliminar las retenciones aunque sean temporales. Falta ver los detalles de la forma de operar y cuándo se hará operativo", expresó el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (CIARA CEC), Gustavo Idígoras.
Desde la entidad reconocieron que esta mañana mantuvieron un anuncio con autoridades nacionales. “El ministro Luis Caputo y su equipo recibieron a CIARA-CEC, a fin de interiorizarlos en el régimen que salió publicado en el Boletín Oficial de hoy”, señalaron.
Y agregaron: “La reunión se dio en un marco de total cordialidad y se revisaron los aspectos técnicos para su implementación en los próximos días. CIARA-CEC colaborará en su pronta implementación”.
El Gobierno Nacional anunció la baja de retenciones a cero para todos los granos y sus subproductos hasta el 31 de octubre, con el objetivo de seguir promoviendo el desarrollo exportador. pic.twitter.com/nsMTLFzH0F
— Ministerio de Economía (@MinEconomia_Ar) September 22, 2025
El Centro de Corredores de Cereales expresó su apoyo a la decisión anunciada por el vocero presidencial. “Esta medida es un claro impulso al dinamismo del comercio de granos, que permitirá movilizar stocks y reavivar las operaciones en el corto plazo”, expresaron.
En este punto, consideraron que “la eliminación de impuestos distorsivos, como las retenciones, crea un escenario de precios más transparentes y eficientes, que beneficia a toda la cadena, desde el productor hasta el exportador”. Además, remarcaron que “como intermediarios clave, consideramos que esta política facilita las transacciones, fomenta una mayor fluidez en la comercialización y contribuye a generar mayor volumen de negocios”.
Más allá de este optimismo, advirtieron que “si bien esta medida temporal es bienvenida, reforzamos la necesidad de que el país se dirija hacia un esquema de políticas permanentes y predecibles”.
En el caso de las entidades que integran la Mesa de Enlace, las reacciones fueron diversas. En el caso de Federación Agraria Argentina (FAA), afirmaron que la baja en los derechos de exportación no representa una ayuda para el eslabón primario.
“Hemos dicho incansablemente que las medidas de carácter transitorio no benefician al sector productivo, no nos dan esa previsibilidad que los productores necesitamos al momento de encarar una inversión para una próxima cosecha”, explicó Andrea Sarnari, presidenta de FAA.
Al momento de analizar el impacto del Decreto 682/2025, remarcó que “los productores sobre todo de pequeña y mediana escala, ya hemos vendido todos nuestros granos y no seremos los beneficiarios de una medida transitoria como esta”.
En declaraciones periodísticas, sostuvo que medida si será una ayuda para quienes tuvieron espalda como para guardar los granos, como el caso de los exportadores o productores de gran escala.
En paralelo al comercio de granos, Sarnari sostuvo que esta medida puede afectar al sector de la proteína animal. “Hoy los productores que hacen carne y los productores lácteos seguramente van a sentir un cimbronazo también, en el costo que tiene el alimento para los animales”.
Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), admitió que el anunció “nos agarró por sorpresa, es algo que venimos reclamando desde hace tiempo y lamento que no hayan incluido a la carne”.
El titular de la SRA adelantó que a partir de las 14 de hoy, la Mesa de Enlace mantendrá un encuentro con el secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, para analizar los detalles de la medida. Con respecto al impacto de la flamante normativa, Pino subrayó que “estas cosas temporales generan cierto ruido en el comercio de granos”.
El directivo -de muy buena relación con el presidente Javier Milei- explicó que “lo que me llama la atención es que el Gobierno, ante una necesidad, haya tomado una decisión de bajar impuestos en vez de subirlos”.
Javier Preciado Patiño, analista y ex subsecretario de Mercados Agropecuarios, remarcó que “el Gobierno volvió a sorprender con una medida de eliminación, en este caso de los derechos de exportación hasta el 31 de octubre, claramente es una medida electoral para sostener el valor del dólar sin sobresaltos hasta las elecciones”.
Al momento de argumentar esta postura, afirmó que “el decreto es muy claro y la necesidad que tiene el Gobierno de dólares, porque les da ahora tres días a los exportadores para que una vez hecha la declaración jurada de venta al exterior, ingresen esos dólares, antes eran 15 días en el otro dólar soja”.
El consultor explicó que en líneas generales, la exportación suele promediar una liquidación de divisas de USD 1.700 millones durante octubre y con el objetivo de USD 7.000 millones, buscan cuadruplicar esa cifra en un mes que las ventas de granos -por una cuestión estacional- suelen bajar.
En este punto, Preciado Patiño hizo zoom sobre un aspecto clave: “¿El productor estará dispuesto esta vez a vender la soja y el maíz o adelantar el trigo a la expectativa de que va a ser un buen negocio hacerlo ahora?”, preguntó. Entre algunos de los efectos colaterales que puede generar esta medida, alertó sobre una industria local que puede perder materia prima, ante mayores ventas de poroto a China.
Y concluyó: "Evidentemente, los dólares de Estados Unidos (en referencia a un posible préstamo norteamericano) no están, porque no habría esa necesidad de salir a buscar 7.000 millones de acá al 26 de octubre".