23/09/2025 - Edición Nº959

Política

Escándalo en Chaco

Denuncian que Zdero gastó $3.570 millones en leche no apta para niños

22/09/2025 | El gobernador de Chaco, Leandro Zdero, enfrenta fuertes cuestionamientos tras revelarse que su gestión adjudicó a la empresa Cheek S.A. la compra de 128 toneladas de leche en polvo dentro de los módulos alimentarios del plan Ñachec, por un monto total de $3.570 millones, pese a que los productos no cumplen con los estándares del Código Alimentario Argentino.



La operación, realizada en marzo de este año a través de Fiduciaria del Norte S.A., incluyó marcas como Bongú y Purilac. Estudios municipales ya habían advertido que la primera no reúne los requisitos de calidad, mientras que la segunda se comercializa como “bebida láctea”, con más de un 40% de aditivos y grasas, y no es un sustituto de la leche. Aun así, el Ministerio de Desarrollo Humano provincial aprobó la oferta sin evidencias de controles nutricionales.

El caso reaviva viejas sospechas: Cheek S.A. fue protagonista en 2018 del escándalo de la “Leche Robada”, cuando desaparecieron 200 toneladas en una compra estatal. En aquel entonces, la Justicia comprobó que el Estado chaqueño pagó hasta 86% más que Nación por un volumen similar.

Además de la calidad del producto, la polémica se centra en el mecanismo de compra. Desde que asumió Zdero, todos los concursos se canalizan por Fiduciaria del Norte, que cambió la modalidad: ahora se licita “por bulto” y no “por renglón”. Según especialistas en compras públicas, esto elimina a productores locales, reduce la competencia y eleva artificialmente los precios.

La opacidad en la gestión de alimentos no es nueva. En 2024, durante el Operativo Impenetrable, se compraron 22.000 módulos por más de $1.000 millones sin licitación abierta y con apenas dos oferentes, entre ellos Cheek S.A., incumpliendo la Ley de “Compre Chaqueño”.

El actual esquema deja a Zdero en el centro de las críticas: aunque intente responsabilizar a Fiduciaria del Norte, fue su decisión trasladar todas las compras a ese organismo. Expertos advierten que esta práctica “desdibuja los controles y compromete directamente al gobernador”.

La pregunta que sobrevuela en Chaco es clara: ¿cómo se garantiza que los recursos destinados a los sectores más vulnerables no terminen en operaciones opacas y en productos que ni siquiera son leche real?.

ND