
En un Cilindro colmado, Racing Club venció 1-0 a Vélez Sarsfield en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa Libertadores y se metió entre los cuatro mejores del torneo continental, donde enfrentará al ganador del cruce entre Flamengo y Estudiantes de La Plata.
En el encuentro de ida, la Academia se había impuesto por la mínima en Liniers gracias a un gol de Adrián “Maravilla” Martínez y a la expulsión de Lisandro Magallán, que condicionó al conjunto local. En Avellaneda volvió a mostrar solidez y encontró el gol sobre el final, cuando Santiago Solari definió tras un centro de Gabriel Rojas.
El partido comenzó con polémica: a los 5 minutos, hubo un claro penal de Elías Gómez sobre Maravilla Martínez, pero el árbitro uruguayo Esteban Ostojich cobró una falta anterior. Con el aliento de la hinchada, Racing mantuvo la presión y generó múltiples situaciones en el primer tiempo. A los 14’ y los 20', el arquero Tomás Marchiori salvó tres chances claras: un pelotazo de Almendra desde la medialuna y dos cabezazos de Solari y Pardo que tenían destino de gol.
A los 25 minutos, Juan Nardoni debió salir lesionado, encendiendo una alarma en el mediocampo académico. Pero lejos de bajar la intensidad, Costas metió en su reemplazo a Zuculini y Racing siguió acorralando a Vélez, a tal punto que a los 41’ el equipo ya había tenido al menos siete oportunidades de abrir el marcador.
Aunque Vélez tuvo más posesión en el complemento, el conjunto local fue amplio dominador en situaciones de gol: 21 chances contra solo 4 del Fortín. No pasó mucho en la primera media hora del ST, excepto por un disparo de Machuca a los 62' que se le coló a Cambeses y se metía dentro del arco, pero el arquero llegó a atraparla con lo justo para que una parte de la pelota quedara sobre la línea de cal.
Si bien desde la TV estaba claro que el balón no había ingresado en su totalidad, el hombre de negro chequeó la jugada en el VAR y anuló el empate global. Como suele hacerse desde hace un tiempo, el juez intentó explicar al público la decisión, pero un desperfecto técnico en su micrófono se lo impidió. Pese a ello, la decisión ya había sido tomada.
Fue un golpe anímico para los de Liniers, ya que el 1-0 cambiaba la historia. La bronca de Guillermo Barros Schelotto era entendible, pero también comprendió que lo cobrado había sido válido. Hasta allí Cambeses no había sido exigido demadiado, pero el partido fue entretenido y hubo algunas chances más para mojar la garganta, sobre todo para el conunto albiceleste: a los 76 minutos, un gran aguante de Maravilla ante cuatro rivales provocó un peligroso tiro libre y la ovación de la gente, porque no tenía a nadie con quién descargar. Gracias a su esfuerzo, Rojas ejecutó un centro perfecto que terminó con un cabezazo en el palo de Santiago Sosa.
Pero la sufrida paciencia de los fanáticos de la Academia no podía esperar más: apenas cinco minutos después, Rojas volvió a hacer de las suyas y, con una jugada fenomenal desde la izquierda, encontró a Solari por el segundo palo: gol y explosión en el Cilindro.
EL GOL DE SOLARI A VÉLEZ 🔥
— Data Racing 👑 (@DataRacingOK) September 23, 2025
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Con el 1-0 (y 2-0 global) la serie estaba finiquitada y los hinchas ya comenzaban a celebrar el pase a unas semis largamente esperadas. El equipo fue parejo en todas las líneas con varios jugadores que tuvieron una sobresaliente actuación, tanto en este encuentro como en los cruces previos de la Copa. Caso Maravilla Martínez, Santiago Solari, Santiago Sosa y Gabriel Rojas. Nardoni, pese a que salió lesionado, también está en ese grupo, y hace rato se lo considera para ser el reemplazante natural de Paredes en el recambio de la selección argentina.
Racing espera ahora por el desenlace del cruce entre Flamengo y Estudiantes, que se define esta semana en La Plata. El equipo de Avellaneda buscará volver a una final continental tras más de cinco décadas, cuando salió campeón en 1967. Para ese entonces primero deberá recuperar soldados como Nardoni, una pieza fundamental si quiere afrontar el reto con un plantel completo y afilado para enfrentar a un gigante sudamericano.