
La investigación por el brutal asesinato de Brenda Del Castillo (20), Morena Verdi (21) y Lara Gutiérrez (15) sumó un dato estremecedor: las muertes fueron grabadas y transmitidas en vivo a través de TikTok. Según confirmaron fuentes cercanas a la causa, el presunto líder narco de nacionalidad peruana habría creado un grupo privado en esa red social para enviar un mensaje intimidante a los cuadros medios de su propia organización.
Las imágenes, que habrían sido vistas por al menos 45 personas en tiempo real, mostraban las torturas y ejecuciones de las jóvenes. “Esto les pasa a los que nos roban”, fue la frase atribuida al autor material del hecho, según reconstruyeron los investigadores. Esa transmisión, con un nivel de crueldad inédito, dio marco al carácter mafioso del crimen y explicó la saña con que se actuó contra las víctimas, cuyos cuerpos fueron luego enterrados en una vivienda del barrio Villa Vatteone, en Florencio Varela.
El hallazgo de las tres jóvenes se produjo este miércoles, tras varios días de búsqueda, y generó conmoción en La Matanza y Florencio Varela. Las familias ya realizaron el reconocimiento formal de los cuerpos.
Los resultados preliminares de las autopsias confirmaron la violencia con que se perpetró el triple crimen. Una de las chicas presentaba hundimiento de cráneo por un golpe severo; otra, un corte profundo en el abdomen hecho después de su muerte; y la tercera, múltiples golpes, puñaladas e intentos de incineración. En el caso de la menor, además, se constató que tenía la oreja izquierda cortada, la carótida seccionada y quemaduras en los dedos producidas en vida.
Los forenses de Lomas de Zamora determinaron que los crímenes ocurrieron entre la medianoche del viernes y las primeras horas del sábado pasado. Aunque todavía se investiga el móvil, los investigadores sostienen que la filmación y difusión en TikTok fueron parte de un mensaje mafioso con el que se buscó disciplinar a la propia banda.
El uso de una red social para transmitir en vivo semejante atrocidad marca un escalón más en la violencia del narcotráfico y abre un debate sobre el rol de las plataformas digitales en este tipo de crímenes.