
El dolor y la indignación se mezclan en la voz de Sabrina, la mamá de Brenda Del Castillo, una de las tres jóvenes asesinadas en Florencio Varela. Tras darle el último adiós a su hija en el cementerio, aseguró que no se quedará de brazos cruzados y que se manifestará todos los días “hasta que me traigan los verdaderos responsables y no perejiles”.
Acompañada por su sobrino Federico, Sabrina describió como “injusto lo que le pasó a Brenda” y señaló que el único camino posible es la lucha diaria por verdad y justicia. “No accionaron como corresponde, para eso pagamos los impuestos, pero después está el gobernador Axel Kicillof en Nueva York paseando”, lanzó con crudeza, en alusión a la falta de respuestas oficiales.
En medio del duelo, también hizo una autocrítica personal: “Mi deber como mamá era cuidar a mi hija, me hago responsable, pero no me puedo echar la culpa de todo”. Sus palabras reflejaron tanto la desolación como la necesidad de que se esclarezca el crimen que conmocionó a La Matanza y Florencio Varela.
Para Sabrina, la investigación está plagada de falencias. “La investigación fue mala y es la Justicia la que les deba decir a ellos qué pasó”, afirmó. Sus críticas apuntaron de lleno a los procedimientos iniciales y al rumbo que tomó la causa. Antes de concluir, reiteró su reclamo: “Es injusto lo que les tocó”.