01/10/2025 - Edición Nº967

Internacionales

Firmeza diplomática

La Casa Blanca actúa: el motivo detrás de la revocación de la visa a Petro

27/09/2025 | La Casa Blanca responde con contundencia a lo que considera una intromisión peligrosa, marcando un límite a la conducta del presidente colombiano.



El gobierno de Estados Unidos anunció la revocación de la visa del presidente colombiano Gustavo Petro, luego de que este, durante su paso por Nueva York, llamara a soldados estadounidenses a desobedecer órdenes y a movilizarse contra la administración de Donald Trump. Para Washington, se trató de un acto de grave irresponsabilidad política, que no podía quedar sin consecuencias.

El Departamento de Estado calificó la conducta de Petro como “incendiaria e imprudente”, señalando que un jefe de Estado no puede incitar a la violencia en territorio extranjero sin enfrentar repercusiones. La decisión de revocar su visa es interpretada como una medida de defensa institucional, destinada a preservar la estabilidad interna y proteger a las fuerzas armadas de intentos de manipulación externa.

Un límite necesario

La medida busca enviar un mensaje claro: EE. UU. no tolerará injerencias extranjeras en su política doméstica ni llamados que puedan socavar la disciplina militar. El gesto adquiere un valor simbólico, ya que marca una línea roja frente a mandatarios que pretendan trasladar sus discursos ideológicos a suelo estadounidense.

Para sectores conservadores, la revocación es coherente con la doctrina de “tolerancia cero” frente a conductas que amenacen la seguridad nacional. Lejos de tratarse de un capricho político, se presenta como una respuesta legítima ante un acto hostil, en defensa de las instituciones democráticas.

Impacto regional y mensaje internacional

La medida también tiene un efecto disuasorio para otros líderes de la región que, en su retórica, puedan verse tentados a confrontar directamente a Estados Unidos desde su propio territorio. Al actuar con firmeza frente a Petro, Washington busca reafirmar su papel como potencia que protege su soberanía y no permite que su espacio interno se convierta en escenario de agitaciones externas.

En paralelo, la decisión puede generar incomodidad en sectores diplomáticos, pero refuerza la idea de que la política exterior estadounidense prioriza la seguridad por encima de la complacencia. En un contexto de crecientes tensiones globales, la administración Trump busca proyectar una imagen de autoridad y control frente a aliados y adversarios.

Una acción contundente 

La revocación de la visa de Gustavo Petro puede leerse como un acto de defensa institucional y firmeza diplomática, más que como una provocación. Si bien abre un nuevo capítulo de fricciones con Colombia, el mensaje de fondo es inequívoco: ningún líder extranjero puede incitar a la insubordinación en suelo estadounidense sin enfrentar consecuencias. El paso dado por Washington consolida la narrativa de una administración que no vacila en ejercer poder para salvaguardar su estabilidad interna.