
El plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Peticiones, Poderes y Reglamento se reunirá desde las 14 para dictaminar sobre la iniciativa que ya cuenta con media sanción del Senado. El objetivo es que la norma llegue al recinto el próximo miércoles 8 de octubre.
El proyecto introduce cambios sustanciales: bastará con el rechazo de una sola cámara para anular un DNU —a diferencia del esquema actual, que exige el rechazo de ambas— y fija un plazo máximo de 90 días desde su publicación para que el decreto obtenga respaldo parlamentario, caso contrario perderá vigencia. Además, establece que si un decreto es rechazado, el Ejecutivo no podrá insistir sobre la misma materia durante ese año legislativo.
La iniciativa apunta a modificar la ley 26.122, sancionada en 2006, que blindó a los decretos presidenciales y dejó con escasas herramientas a la oposición de turno para frenarlos.
El avance opositor encendió las alarmas en el oficialismo, que se ha apoyado recurrentemente en los DNU para impulsar políticas sin pasar por el Congreso.
ND