
La diputada de La Libertad Avanza, María Fernanda Araujo, presentó un proyecto de repudio “a las acciones realizadas por integrantes del CECIM La Plata (Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas La Plata).
“En su reciente visita a las Islas Malvinas desplegaron banderas y consignas políticas partidarias sobre suelo sagrado argentino”, se quejó la legisladora libertaria.
En efecto, aquellas banderas decían “MILEI LA SOBERANÍA NO SE NEGOCIA” y “NO AL ACUERDO MONDINO LAMY”.
“El Presidente y su hermana están desmantelando, paso a paso, los consensos básicos que el pueblo argentino sostuvo durante décadas en torno a Malvinas. No se trata de gestos aislados: estamos frente a un abandono deliberado de la vía diplomática y de la defensa de la integridad territorial”, habían señalado desde el CECIM.
Además, remarcaron que “la actual gestión incumple el marco normativo argentino, haciendo la vista gorda frente a empresas que explotan ilegalmente la pesca y buscan avanzar en actividades hidrocarburíferas en Malvinas, al mismo tiempo que se les permite operar en el territorio continental argentino”.
Así, la diputada de LLA consideró que “las Islas Malvinas constituyen un espacio de memoria nacional y respeto absoluto. Cualquier utilización con fines partidarios constituye una ofensa a la causa de soberanía, a los héroes que descansan allí, a sus familias y al pueblo argentino en su conjunto”.
“La Causa Malvinas es patrimonio de todos los argentinos y no admite divisiones ni manipulaciones políticas. Resulta una vergüenza inaceptable que quienes tuvieron el honor de combatir junto a nuestros héroes caídos, de ser sus compañeros en las trincheras de la Guerra de 1982, hoy elijan politizar la tierra consagrada por la sangre de aquellos que quedaron allí para siempre”, amplió en los fundamentos del proyecto presentado.
Y completó: “Las Malvinas no son un escenario para la disputa partidaria ni un espacio de propaganda. Son símbolo de soberanía irrenunciable, de unidad nacional y de sacrificio eterno. Usarlas para fines políticos constituye una afrenta a la historia, a la memoria y a los valores que representan”.
FA