
El gobernador Axel Kicillof pidió a la Legislatura bonaerense la aprobación de un endeudamiento por USD 1.045 millones, pero la iniciativa se topa con un obstáculo inesperado: la interna con La Cámpora y el fantasma de ausencias legislativas que podrían dejar sin quórum la sesión.
La discusión está prevista para esta tarde en el Senado provincial y las negociaciones se concentran en la vicegobernadora Verónica Magario, que ofició de enlace entre el mandatario y el ministro de Hacienda, Pablo López.
El conflicto, según fuentes parlamentarias, trasciende lo técnico y responde a un juego de poder: concederle la deuda a Kicillof significaría para La Cámpora perder una carta de presión en futuras negociaciones.
A esta puja política se suma una postal insólita: el clásico entre River y Racing por Copa Argentina, programado para las 18 horas en Rosario, tentó a algunos legisladores a priorizar la tribuna futbolera sobre el recinto. La posible ausencia de varios ediles alimenta la incertidumbre en torno a una votación clave para el Ejecutivo.
En este escenario, el oficialismo enfrenta el desafío de consolidar respaldos en medio de una interna que amenaza con desgastar aún más la convivencia dentro del kirchnerismo bonaerense.
El resultado de la sesión marcará no solo el rumbo de las finanzas provinciales, sino también el equilibrio de fuerzas dentro de la propia coalición.
FS