19/10/2025 - Edición Nº985

Sociedad


Regresan a la naturaleza

Liberaron en Río Negro a “Kamin” y “Kuraq”, dos cóndores nacidos en el Ecoparque

08/10/2025 | Dos ejemplares juveniles de cóndor andino, de un año y medio de edad, fueron liberados en la base operativa de Sierra Pailemán (Río Negro) tras un período de adaptación.



En un paso crucial para la recuperación del Cóndor Andino (Vultur Gryphus), la provincia de Río Negro liberó esta semana dos ejemplares juveniles bautizados como "Kamin" y "Kuraq". Los cóndores, de aproximadamente un año y medio de edad, fueron criados en la Unidad de Proyectos Especiales (UPE) del Ecoparque Interactivo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Los ejemplares llegaron a Río Negro en agosto y, tras un período de adaptación, fueron liberados en la base operativa de Sierra Pailemán. La acción reunió a profesionales de la Subsecretaría de Fauna Silvestre, equipos técnicos e investigadores.

El rol de Sierra Pailemán en la conservación

Sierra Pailemán es la primera base operativa del Programa de Conservación del Cóndor Andino, un esfuerzo que lleva más de veinte años de trabajo ininterrumpido. El programa es coordinado por la Fundación Bioandina Argentina junto al Ecoparque y distintas provincias.

Desde su funcionamiento en 2003, la base de Sierra Pailemán ya ha realizado la liberación de más de 70 cóndores en la Patagonia, con el objetivo central de recuperar a esta especie emblemática y asegurar la salud de los ecosistemas andinos.

Amenazas y la importancia del cóndor

El cóndor andino, que en Argentina se encuentra a lo largo de la Cordillera de los Andes, fue declarado en peligro de extinción y está protegido por la Ley Nacional Nº 22.421.

Su principal amenaza es la ingesta de cebos tóxicos, una práctica ilegal utilizada por ganaderos para controlar especies predadoras. Sin embargo, el cóndor andino cumple un rol invaluable en los ecosistemas debido a su dieta carroñera.  En este sentido, y al consumir carroña, evita la proliferación de bacterias que podrían generar enfermedades en humanos, además de contribuir así al equilibrio del ecosistema.