Lords of dogtown (2005), dirigida por Catherine Hardwicke y protagonizada por Emile Hirsch, John Robinson y Victor Rasuk, es una película que capturó el espíritu rebelde de la cultura del skate en los años 70. Pero, a 20 años de su estreno, ¿podríamos señalarla como una producción marcada por la mala suerte?
Este drama biográfico sobre los Z-Boys, un grupo de skaters que revolucionó el deporte en Venice, California, no solo enfrentó serios incidentes durante su rodaje, sino que también vio cómo las prometedoras carreras de sus jóvenes protagonistas no despegaron como se esperaba. La combinación de accidentes en el set y los altibajos profesionales de su elenco nos lleva a preguntarnos si esta película cargaba con una especie de maldición que la persigue hasta hoy.
El rodaje de Lords of dogtown estuvo plagado de contratiempos que dejaron una huella imborrable en el equipo. Según relató John Robinson, la producción enfrentó al menos tres incidentes graves. Uno de los más impactantes involucró a la propia directora, Catherine Hardwicke, quien sufrió un accidente durante la grabación de la secuencia final en una piscina vacía. Hardwicke se cayó de cabeza, perdió el conocimiento y terminó en el hospital con una fractura en el hueso orbital, un evento que aún hoy no tiene una explicación clara. Este incidente no fue el único: dos dobles de riesgo de Emile Hirsch y Victor Rasuk también sufrieron lesiones severas en la misma locación, uno con una clavícula rota y otro con una pierna tan dañada que, según Robinson, “le quedó como un fideo”.

Más allá de los accidentes, la película no logró el impacto comercial ni crítico que se esperaba, recaudando apenas 13 millones de dólares frente a un presupuesto de 25 millones. Además, para sus protagonistas, que interpretaban a las leyendas del skate Stacy Peralta, Tony Alva y Jay Adams, la película no se tradujo en un trampolín para sus carreras.
Victor Rasuk, quien dio vida a Tony Alva, pasó a roles secundarios que apenas se recuerdan sin consultar su filmografía. John Robinson, tras brillar en Elephant de Gus Van Sant, no logró mantener el impulso y optó por una vida más bohemia en Europa, con proyectos esporádicos, incluyendo una reciente colaboración con Van Sant en 2025. Incluso Emile Hirsch, el más reconocido del trío, vio su carrera descarrilarse tras un incidente en 2015, cuando fue arrestado por agredir a una ejecutiva de Paramount, un escándalo que lo llevó a 15 días en prisión y marcó un declive del que ni su papel en Había una vez en Hollywood de Tarantino logró rescatarlo.

La trayectoria de estos actores contrasta dolorosamente con la de Heath Ledger, quien interpretó a Skip Engblom en la película y falleció trágicamente en 2008, poco después de alcanzar la cima con su icónica actuación como el Joker en El caballero de la noche.