
En un nuevo capítulo de la tensión política y cultural entre Nación y Provincia, el gobernador bonaerense Axel Kicillof decidió sostener la denominación “Día del Respeto a la Diversidad Cultural” para el 12 de octubre, en contraposición con el uso de “Día de la Raza” que retomó el gobierno de Javier Milei en sus comunicaciones oficiales. La medida, de fuerte carga simbólica, reaviva un viejo debate sobre el sentido histórico de la fecha.
“En la provincia de Buenos Aires no cambiamos de idea. Vamos a seguir defendiendo la diversidad y el respeto por los derechos de todas las comunidades que forman parte de nuestra identidad”, escribió Kicillof en sus redes sociales. El mensaje fue acompañado por una imagen institucional con la denominación impulsada durante el segundo mandato de Cristina Fernández de Kirchner, quien en 2010 cambió el nombre oficial mediante el Decreto 1584.
En la provincia de Buenos Aires no cambiamos de idea, vamos a seguir defendiendo la diversidad y el respeto por los derechos de todas las comunidades que forman parte de nuestra identidad. #DíaDeLaDiversidad pic.twitter.com/WZ69Z1lBvI
— Axel Kicillof (@Kicillofok) October 12, 2025
En contraste, el Gobierno nacional decidió omitir toda mención a la diversidad cultural y retomó en sus mensajes públicos la denominación “Día de la Raza”, utilizada históricamente en Argentina hasta la reforma impulsada por el kirchnerismo. Esta postura fue difundida a través de videos y gacetillas oficiales, aunque no fue acompañada por ninguna modificación legal del feriado.
De hecho, la propia Resolución 139/2025, firmada por el Ejecutivo nacional para trasladar el feriado al viernes 10 de octubre, sigue utilizando la denominación vigente: “Día del Respeto a la Diversidad Cultural”. Esto indica que, hasta el momento, el cambio es exclusivamente discursivo y no ha sido formalizado mediante un nuevo decreto.
La fecha del 12 de octubre ha sido objeto de discusión durante décadas. Mientras sectores conservadores la consideran una celebración de la "hispanidad", organismos de derechos humanos y comunidades indígenas han reclamado históricamente una resignificación del día. El cambio de nombre impulsado por Cristina Kirchner apuntó precisamente a reconocer el impacto de la colonización y a promover el diálogo intercultural.
Pese a la controversia por el término utilizado, el feriado extendido fue celebrado en ambas jurisdicciones por su impacto en el turismo. Desde el gobierno bonaerense destacaron el movimiento económico generado durante el fin de semana largo, algo que el propio Kicillof había señalado como positivo semanas atrás. Sin embargo, el debate por el nombre muestra que, incluso en cuestiones simbólicas, las diferencias entre Nación y Provincia están lejos de saldarse.