
En la previa a las elecciones del 26 de octubre, el Congreso Nacional discute una serie de leyes vinculadas a la actividad agroindustrial, como el caso de los biocombustibles y la apertura de importaciones de maquinaria usada, que se puso en marcha este año a partir del Decreto 273/25.
En este último caso, se trata de una decisión que fue cuestionada por las cámaras que representan a los fabricantes de maquinaria agrícola, pero que también afecta a la industria argentina más allá de este rubro puntual.
Algo de esto se pudo ver ayer, en el marco de una sesión convocada por las Comisiones de Asuntos Constitucionales y Comercio en la Cámara baja, presididas por los diputados Nicolás Mayoraz (LLA) y Tomás Ledesma (UxP), respectivamente.
Si bien se emitió un dictamen de mayoría con 27 firmas para derogar el Decreto 273/25, el bloque oficialista informó que fueron impulsados un dictamen de rechazo con 19 firmas, y otro de minoría con 3 firmas.
Hernán Zubeldía, presidente de la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA), fue uno de los disertantes de ayer en Diputados. En su exposición, explicó que desde su mirada “no se está analizando el riesgo a futuro desde lo laboral, lo económico y lo fitosanitario”.
En este sentido, advirtió que la importación de maquinaria usada es un regreso a “lo ocurrido entre los años 80’ y 90’, cuando cayeron las 40 fábricas de cosechadoras autopropulsadas, en el país que hizo la primera de estas máquinas en el mundo”.
En diálogo con NewsDigitales, reconoció que si bien el debate por el destino del Decreto 273/25 forma parte de una discusión política, “nosotros no formamos parte de esa discusión política partidaria, sino que fuimos a expresar nuestra visión sobre algo que creemos que se hizo de una forma apresurada”.
El directivo admitió que esta normativa fue “un baldazo de agua fría, los números oficiales de importación de maquinaria agrícola no mueven el amperímetro, nos parece raro que por cuatro o cinco fierros que puedan entrar del exterior, nos puedan poner en jaque”.
Para Zubeldía, en materia de tecnología agropecuaria “somos un país de punta, me gustaría que el productor tome conciencia de eso y que no está bien que nos den las sobras de otros países”.
En este punto, explicó que cuando más se profundiza esta discusión sobre si debe ingresar o no maquinaria usada, se corre el verdadero eje del debate: “El problema del agro hoy es que necesita tener rentabilidad y condiciones crediticias para poder seguir sumando tecnología. Esa es la discusión”.
Y concluyó: “Hoy el productor argentino es campeón y trabaja con tecnología de punta, ¿por qué lo queremos conformar con sacarle dinero y darle fierros usados o viejos?”
El secretario de Coordinación y Producción del Ministerio de Economía de la Nación, Pablo Lavigne, remarcó que el mencionado decreto “fue un pedido de las empresas por su necesidad de acceso al capital y al crédito, ante una dificultad para obtener la maquinaria de punta en general”.
En este punto, puso como ejemplo que renovar una línea de tractores en Argentina “costaba el doble que en Brasil o en Uruguay”.
El autor del proyecto de derogación del Decreto 273/25, el diputado Jorge Neri Araujo Hernández (UxP), expresó que esta normativa “generaba la eliminación del CIBU (Certificado de Importación de Bienes Usados), suprimiendo el control general de toda la maquinaria importada”.
Para el legislador, “al perder el control, se ponen en riesgo muchísimas cosas, no solamente lo socio ambiental, sino a las propias vidas humanas. En la Provincia de Tierra del Fuego, por ejemplo, cerca de 11.000 personas han perdido sus puestos de trabajo por estas políticas de desregulación del Estado”.
Y agregó: “Queremos la derogación porque consideramos que no favorece a la producción y al empleo nacional”.
Unos días antes de esta reunión en Diputados, el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, defendió la medida. Para el funcionario, “el Decreto 273/25 tuvo un efecto extraordinariamente positivo. En lo que va de 2025, 1.014 empresas importaron maquinaria usada, un récord histórico, 40% más que en todo 2024 y 90% más que en todo 2023. En marzo de este año, antes de la reforma, solo 113 empresas usaron el régimen”.
En el caso puntual de la maquinaria agrícola, consideró que “en abril, CREA advertía que las restricciones a la importación hacía que cosechadoras, tractores y sembradoras costaran hasta 3 veces más que en Brasil o Estados Unidos”.
EL KIRCHNERISMO QUIERE AUMENTAR EL COSTO ARGENTINO HACIENDO MÁS CARA LA MAQUINARIA PARA NUESTRAS PYMES Y EMPRESAS. Sí..., lo que escuchás. Aunque no lo creas. Quieren aumentar el "costo argentino", para todas las industrias del país. Vení y conocé esta triste historia.
— Fede Sturzenegger (@fedesturze) October 11, 2025
El… https://t.co/orizqAJP26
Y resumió: “El decreto permitió en el primer semestre una baja de precios del 14% en tractores, 12% en sembradoras y 2% en cosechadoras”.