
El joven, estudiante de una escuela técnica de Bell Ville, apareció en un video con un vestido roto y manchas rojas que simulaban sangre. El hecho generó repudio y dos divisiones del colegio emitieron comunicados de disculpas y rechazo. El grave episodio generó indignación en Córdoba y en redes sociales luego de que un alumno del IPET 267 de esa localidad cordobesa fuera grabado durante su viaje de egresados en Bariloche disfrazado de “mujer violada”.
En las imágenes, difundidas desde la cuenta de Instagram de la promoción (@ p25enet), el adolescente aparece con un vestido roto, el cuerpo pintado con manchas rojas que simulaban sangre y la palabra “violada” escrita en la espalda. El video se viralizó rápidamente, provocando fuertes críticas y repudio generalizado.
Ante la difusión del material, la división del estudiante involucrado emitió un comunicado en el que reconoció la gravedad del hecho y pidió disculpas: “Somos conscientes de la gravedad de lo sucedido. Queremos aclarar que este hecho está desligado de nuestra institución, acompañantes y no representa los valores enseñados. Somos adolescentes y entendemos que es un tema delicado. Pedimos disculpas”.
En paralelo, la otra división del IPET 267 (foto abajo) publicó un mensaje más contundente, en el que expresó su rechazo al episodio y cuestionó el descargo de sus compañeros: “Queremos expresar nuestro más absoluto repudio por las publicaciones de un grupo de compañeros que se encuentra en Bariloche. Las imágenes son indignantes y el comunicado posterior resulta insuficiente para justificar la violencia”.
El grupo agregó además una reflexión sobre el trasfondo del hecho: “Esto no es una ‘cosa de adolescentes’. La mayor parte de nosotros somos mayores de edad. Esto forma parte de una forma de mirar el mundo, de naturalizar las violencias contra nuestros cuerpos. Nos sentimos abrumados y tristes”.
Por último, denunciaron que tras el video reciben ataques en redes sociales, a pesar de que muchos no participaron del viaje: “Estamos siendo presos de violentos ataques por redes y muchos no fuimos parte de eso. La promo 25 no es un grupo de estudiantes irresponsables, pero nuevamente nuestra escuela quedó expuesta a la mirada social que nos condena”.