
Bolivia enfrenta una de las coyunturas más decisivas de su historia reciente. Tras años de déficits fiscales, subsidios crecientes y estancamiento productivo, Jorge “Tuto” Quiroga propone un plan de reformas profundas que busca devolver al país la estabilidad perdida. Su programa, presentado en vísperas de la segunda vuelta electoral del 19 de octubre, apunta a recuperar la disciplina económica, atraer inversión privada y reducir el tamaño del Estado para liberar recursos hacia sectores estratégicos.
Según el exmandatario, el modelo actual basado en la expansión del gasto público ha agotado su capacidad para sostener el crecimiento. Bolivia mantiene una de las tasas de inflación más altas de la región y una deuda que supera el 70 % del PBI, mientras la producción de gas y litio enfrenta caídas por falta de inversión. Ante este escenario, Quiroga propone racionalizar los subsidios, eliminando los que benefician a grupos de altos ingresos y focalizando la ayuda en los sectores vulnerables.
El programa de Quiroga contempla reducir ministerios y empresas estatales deficitarias, promoviendo la eficiencia administrativa y la transparencia en la gestión pública. Su equipo económico plantea que el Estado debe concentrarse en la regulación y el desarrollo de infraestructura, mientras el sector privado lidera la generación de empleo. Además, busca reabrir el diálogo con organismos internacionales y atraer capital extranjero mediante reglas claras y seguridad jurídica.
En materia energética, propone un modelo de participación abierta para el litio, el gas y las energías renovables, donde los ciudadanos sean accionistas a través de fondos de inversión nacionales. Esta fórmula busca evitar la concentración estatal y, al mismo tiempo, asegurar que los beneficios lleguen directamente a la población. Para el candidato, la propiedad compartida de los recursos naturales es una herramienta moderna de inclusión económica y soberanía ciudadana.
Uno de los pilares del plan de Quiroga es la reintegración de Bolivia a los mercados internacionales. Propone retomar acuerdos comerciales con Estados Unidos y Europa, diversificar las exportaciones y fortalecer los lazos con países vecinos a través de la infraestructura energética y de transporte. Según su diagnóstico, solo una economía abierta podrá sostener la creación de empleo y el crecimiento a largo plazo.
La disciplina fiscal y el control del gasto son, en su visión, condiciones indispensables para la justicia social. “No hay igualdad posible en un país quebrado”, afirmó durante su último mitin. Su propuesta no busca eliminar la protección social, sino garantizar su financiamiento sostenible. Quiroga insiste en que un Estado más eficiente permitirá redirigir recursos a salud, educación y seguridad, pilares fundamentales de su plan de gobierno.
🟩 #GrupoFides | #RadioFidesLaPaz Diferentes sectores expresan su apoyo a Jorge Tuto Quiroga de cara a la segunda vuelta electoral. "Hay que jubilar a los socialistas porque solo utilizaron a los sectores sociales. El PDC es la misma chola con otra pollera", dijo Juan Flores. pic.twitter.com/XUTiAm2cir
— Radio Fides Bolivia (@GrupoFides) October 15, 2025
Las encuestas muestran una tendencia ascendente de su candidatura, impulsada por sectores urbanos y productivos que reclaman una conducción más técnica. Para muchos analistas, su programa representa una segunda oportunidad para estabilizar la economía boliviana y sentar las bases de un nuevo ciclo de prosperidad. Si logra imponerse en el balotaje, Bolivia podría iniciar una etapa de modernización basada en responsabilidad fiscal, apertura y participación ciudadana.
En un contexto regional donde los populismos atraviesan una fase de desgaste, la figura de Tuto Quiroga encarna la apuesta por la seriedad institucional y el liderazgo pragmático. Su visión busca reconciliar eficiencia económica con justicia social, bajo una premisa clara: que el progreso de Bolivia dependa de la libertad de sus ciudadanos y no del tamaño del Estado.