
Una serie de nombres, empresas y transferencias vuelve a poner a La Libertad Avanza (LLA) bajo el foco. En el centro de la escena aparecen Alejandra Bada Vázquez, dueña de Lácteos Vidal y financista de la campaña de Patricia Bullrich, y Federico “Fred” Machado, empresario con pedido de extradición a Estados Unidos por causas vinculadas al narcotráfico.
De acuerdo con una investigación revelada por Rolando Graña y Carolina Fernández en Splendid AM 990, la conexión entre ambos no es nueva. Surge de una red que combina lazos personales, negocios compartidos y un pasado judicial que involucra a la diputada libertaria Lorena Villaverde, hoy candidata al Senado por Río Negro.
Villaverde fue condenada en Estados Unidos por tenencia de cocaína y dinero sin justificar. Su pareja, Claudio Ciccarelli, es primo de Machado y estuvo asociado a Cecilia Roncero, esposa de Bada Vázquez.
De esa sociedad, y tras una serie de movimientos empresariales, nació Eco Friendly, una firma patagónica que intentó ingresar en el negocio minero, pero fue frenada por la provincia de Neuquén cuando quiso operar en la mina de oro y plata Andacollo.
Las conexiones financieras, sin embargo, siguieron activas. Documentos judiciales muestran transferencias entre Lácteos Vidal y Wright Brothers Aircraft, la empresa norteamericana vinculada a Machado y a su socia Debra Lynn Mercer-Erwin, condenada a 15 años de prisión en Texas. Esa misma compañía, según la Justicia, había enviado 200.000 dólares a José Luis Espert durante su campaña de 2021.
El nombre de Lácteos Vidal volvió a resonar en 2023, cuando aportó 215 millones de pesos a la campaña presidencial de Patricia Bullrich, hoy ministra de Seguridad. En aquel momento, la propia Bullrich había respaldado públicamente a la empresaria durante el conflicto gremial con los trabajadores lácteos, e impulsó una ley “antibloqueos” que tomó el caso como bandera.
El mapa se amplía con Ciccarelli, señalado como presunto testaferro de Machado, quien llegó a controlar el 39% de los permisos de explotación de canteras en Río Negro, un porcentaje superior incluso al de YPF.
Según confirmó el gobernador Alberto Weretilneck, hasta la semana pasada el empresario ocupaba un cargo en la Legislatura provincial por el bloque Juntos, del que renunció tras hacerse públicas estas conexiones.
La trama entre financistas, dirigentes y empresarios deja una pregunta abierta: ¿dónde termina el apoyo político y dónde comienza el negocio?
FS