
El Bochum es un equipo de fútbol de Alemania de la ciudad del mismo nombre, en la parte central de la cuenca del Ruhr, entre las ciudades de Essen y Dortmund. En 2021 logró ascender por primera vez en su historia a la Bundesliga, la máxima categoría del fútbol alemán.
El descenso de 2024 hizo que el club encare una profunda autocrítica, desde el liderazgo hasta la estrategia a largo plazo. Primero se despidió al técnico Dieter Hecking y luego al director deportivo Dirk Dufner el mes pasado. Desde entonces, se analiza cómo reconstruir el club.
El CEO Andreas Luthe entró en una espiral de indecisiones que llevaron a barajar distintos técnicos en tres semanas. Sin embargo, el club parece encontrar respuesta en la tecnología.
Bochum está integrando la inteligencia artificial en sus operaciones deportivas. Según trascendió, está trabajando con Plaier, una plataforma de análisis de fútbol basada en datos que utiliza algoritmos avanzados para buscar y predecir el rendimiento de los jugadores.
Bajo este plan, el sistema de Plaier no sólo sugeriría posibles fichajes, sino que también ayudaría en la evaluación de contratos, el seguimiento del desarrollo de los jugadores e incluso en la identificación de un director deportivo adecuado.
Según Sport Bild, la asociación podría costar más de 100,000 € al año, con bonificaciones adicionales vinculadas a transferencias exitosas y beneficios de jugadores identificados por la IA.
El hombre que lidera este proyecto es Till Gronemeyer, una nueva figura clave en la reconstrucción de Bochum. Él imagina un enfoque integrado donde la IA complementa y, en ocasiones, reemplaza las estructuras de scouting tradicionales.
Pocos clubes han llegado tan lejos. Mientras que los equipos europeos de primer nivel como Liverpool, Manchester City, Paris Saint-Germain y Bayern Munich emplean IA para la prevención de lesiones y el análisis táctico, el modelo de Bochum tiene como objetivo dar un papel de toma de decisiones a la inteligencia artificial en el club.