
La Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) expresó su preocupación ante la inminente pérdida de vigencia del decreto que permite compatibilizar los planes sociales con el empleo registrado en el sector agropecuario. La normativa, que lleva cuatro años en funcionamiento y fue considerada una herramienta fundamental para fomentar la formalización laboral sin desproteger a los beneficiarios de programas sociales, caducó el 30 de septiembre pasado.
“Esta medida fue clave para garantizar la protección social de miles de familias rurales”, advirtió el sindicato en un comunicado oficial, donde solicitó al Gobierno nacional que prorrogue su aplicación. Desde la organización señalaron que el fin de la norma podría generar un retroceso en materia de inclusión laboral, especialmente en zonas donde la estacionalidad del trabajo rural impide la continuidad del empleo formal.
El decreto -implementado originalmente para incentivar la contratación en blanco de trabajadores rurales- permitió que los beneficiarios de planes como el Potenciar Trabajo pudieran mantener la asistencia mientras ingresaban a un empleo registrado. El esquema buscaba reducir la informalidad y promover una transición gradual hacia la estabilidad laboral.
Según estimaciones del gremio, miles de trabajadores rurales se vieron beneficiados por la medida, que además ayudó a cubrir la demanda de mano de obra en actividades como la cosecha, la horticultura y la ganadería. “La caída de esta norma genera incertidumbre, afecta la producción agropecuaria y representa un retroceso en la lucha por la formalización laboral” alertaron.
Desde la UATRE insistieron en la necesidad de mantener políticas públicas que articulen empleo y protección social, y recordaron que la medida “Las políticas laborales deben construirse desde la realidad de quienes trabajan en los campos, empaques y fincas del país, brindando previsibilidad y certezas”.
GZ