
En una llamada oficial con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, la dirigente venezolana María Corina Machado expresó su pleno respaldo al Estado de Israel y su determinación de reorientar la política exterior de Venezuela hacia la democracia y la cooperación occidental. El contacto, confirmado por la oficina del primer ministro, marca un gesto simbólico que podría redefinir el posicionamiento de Caracas en Medio Oriente tras años de alineamiento con Teherán y Damasco.
Machado calificó el acuerdo de alto el fuego en Gaza y el regreso de rehenes como un paso humanitario fundamental, destacando el papel de Israel frente a las amenazas del régimen iraní. En palabras del comunicado, la líder venezolana enfatizó la necesidad de unir a las democracias frente a los regímenes autoritarios que promueven el terrorismo y la desinformación. Su mensaje contrastó abiertamente con la postura del gobierno de Nicolás Maduro, aliado de Irán y defensor del eje antiisraelí en la región.
Para Machado, el acercamiento con Israel no es solo una decisión diplomática, sino una declaración de principios. Su equipo adelantó que, de llegar al poder, restablecerá las relaciones bilaterales rotas desde 2009 y trasladará la embajada venezolana a Jerusalén, siguiendo el ejemplo de países que reconocen la soberanía israelí sobre su capital histórica. “Venezuela volverá a estar del lado de la libertad”, afirmó un portavoz opositor.
La propuesta fue celebrada por sectores de la comunidad judía venezolana, que vieron en ella una señal de reconciliación tras años de hostigamiento y distanciamiento oficial. Analistas internacionales señalan que una alianza Caracas-Tel Aviv fortalecería el eje prooccidental en América Latina, equilibrando la influencia de Irán y Rusia en la región.
La conversación también abordó la cooperación tecnológica y de seguridad. Israel es reconocido por su innovación en agricultura, energía y ciberdefensa, sectores donde una futura administración opositora busca establecer convenios. La visión de Machado apunta a reinsertar a Venezuela en el sistema internacional con socios democráticos, transparentes y tecnológicamente avanzados.
Desde Jerusalén, Netanyahu agradeció el respaldo y destacó el valor de la solidaridad venezolana en momentos de tensión global. “El pueblo de Israel reconoce y aprecia la amistad del pueblo venezolano”, señaló el comunicado oficial.
I spoke with Israeli Prime Minister Benjamin Netanyahu today and thanked him for his warm congratulations to the people of Venezuela on our 2025 Nobel Peace Prize.
— María Corina Machado (@MariaCorinaYA) October 17, 2025
We Venezuelans deeply value peace, and we know that achieving it requires immense courage, strength, and moral… https://t.co/tFKVemoOpA
El gesto de Machado también resuena en la política continental. En una región donde persisten simpatías hacia el eje de Teherán y Moscú, su respaldo a Israel representa un giro estratégico y moral. La dirigente apuesta por una diplomacia basada en valores, no en alianzas ideológicas, lo que podría reposicionar a Venezuela como socio confiable para Occidente.
Si algo deja claro esta llamada es que María Corina Machado busca reconstruir el prestigio internacional de su país. En su visión, el futuro de Venezuela pasa por el compromiso con la verdad, la libertad y la seguridad compartida. En su saludo a Netanyahu, pareciera haber resumido un cambio de era: “Nuestros pueblos comparten la misma causa: la defensa de la vida y la democracia”.