Lo que ocurrió en el partido entre Gimnasia (J) y Deportivo Madryn por el Reducido de la Primera Nacional fue un verdadero escándalo. El árbitro Lucas Comesaña y la terna arbitral recibieron intimidaciones, insultos y amenazas luego del primer tiempo.
En este sentido, el Tribunal de Disciplina de AFA le otorgó un plazo de 48 horas a Gimnasia de Jujuy para emitir un descargo sobre los hechos que derivaron en la suspensión del encuentro. El jueves se podría conocer el fallo.
El partido entre Gimnasia de Jujuy y Deportivo Madryn por los cuartos de final del Reducido de la Primera Nacional fue detenido en el entretiempo, luego de la visita del secretario general del club local, Leandro Meyer, al vestuario.
"Salgan a dirigir bien porque de acá no se van, los meto a los cuatro presos y los dejo tres días detenidos en Jujuy" le habría dicho el dirigente a los árbitros, según El Gráfico.
Allí, Lucas Comesaña tomó la decisión de suspender el encuentro y radicar la denuncia correspondiente en una comisaría de San Salvador, en un hecho que expone las graves problemáticas de violencia y falta de garantías en algunos clubes del ascenso.

A los 42 minutos del primer tiempo, Gimnasia había abierto el marcador con un gol de Alejandro Quintana y parecía encaminarse hacia una clasificación histórica, cuando en los vestuarios aparecieron las amenazas.
El árbitro Lucas Comesaña, explicó: “Suspendí por cuestiones que no deben pasar. No quiero reaccionar, pero las amenazas fueron hacia todos los miembros del equipo arbitral y, en particular, hacia mí”.
El presidente de Deportivo Madryn, Ricardo Sastre, respaldó la decisión del árbitro y dijo: “Nosotros queríamos terminar el partido, pero si no hay garantías, no lo podemos seguir. La seguridad de los árbitros es lo primero”.
En cambio, el presidente de Gimnasia de Jujuy, Walter Morales, minimizó la gravedad de los hechos y sugirió que Comesaña habría actuado de manera dramática: “El árbitro ya tenía la decisión tomada y dramatizó demasiado. Nosotros ofrecimos todas las garantías para continuar, pero en el fútbol argentino siempre hay insultos y enfrentamientos”.