En los últimos meses el fútbol español estuvo marcado por una larga polémica: la realización de un partido de su torneo, LaLiga, fuera del territorio de España. Villarreal y Barcelona iban a jugar en Miami, pero finalmente el encuentro se canceló.
En un comunicado, LaLiga explicó que “tras conversaciones con la promotora del partido oficial en Miami, esta ha comunicado su decisión de cancelar la organización del evento debido a la incertidumbre generada en España durante las últimas semanas”.
LaLiga agregó que “lamenta profundamente que este proyecto, que representaba una oportunidad histórica e inigualable para la internacionalización del fútbol español, no pueda seguir adelante”.
El objetivo según LaLiga era “la celebración de un partido oficial fuera de nuestras fronteras. El mismo habría supuesto un paso decisivo en la expansión global de nuestra competición, reforzando la presencia internacional de los clubes, el posicionamiento de los jugadores y la marca del fútbol español en un mercado estratégico como es Estados Unidos”.

Para LaLiga, “el proyecto cumplía plenamente con la reglamentación federativa y no afectaba a la integridad de la competición, tal y como han ratificado las instituciones competentes que velan por su cumplimiento, las cuales se oponían por otras circunstancias”.
“En un contexto de creciente competitividad global, donde ligas como la Premier League o competiciones como la UEFA Champions League continúan aumentando su alcance y capacidad de generar recursos, iniciativas como esta son esenciales para garantizar la sostenibilidad y el crecimiento del fútbol español”, agregaron.
Esta era la segunda vez que LaLiga buscaba llevar un partido a Estados Unidos y se frustró el plan. Ahora principalmente por el rechazo de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y hace años, tras el acuerdo con la firma Relevent, promotora del choque en 2018, por la oposición de la Federación.
LaLiga y la Real Federación Española de Fútbol fueron a juicio hace cinco años por la negativa de la segunda a autorizar la celebración también en Estados Unidos del partido Girona-Barcelona de la temporada 2018-2019,.
El juicio finalmente se resolvió en contra de LaLiga, primero en un juzgado de lo mercantil de Madrid, después en la Audiencia Provincial y luego en el Tribunal Supremo. Para la autoridad encargada del torneo local, “renunciar a este tipo de oportunidades dificulta la generación de nuevos ingresos, limita la capacidad de los clubes para invertir y competir, y reduce la proyección internacional de todo el ecosistema futbolístico nacional”.